Rumanía se está preparando para ampliar su ejército con 35.000 soldados en medio de las crecientes tensiones regionales alimentadas por la guerra de Rusia en Ucrania. El primer ministro, Marcel Ciolacu, que ha desvelado esta apuesta defensiva, ha señalado que su Ejército podría crecer hasta alrededor de 100.000 efectivos en servicio activo en los próximos cuatro años, desde su fuerza actual de 81.000, aproximadamente.

La fuerza de reserva voluntaria de Rumania también podría ver un importante aumento desde su tamaño actual de 79.000.

Ciolacu reconoció públicamente los desafíos para esa expansión, citando los despidos frecuentes, las percepciones públicas negativas de las carreras militares y la dura competencia del mercado laboral privado, indica el medio especializado The Defense Post. Estos problemas han sido atribuidos a la actual escasez de personal en las Fuerzas Terrestres Rumanas.

El crecimiento de plantilla previsto en Rumanía tiene como objetivo reforzar la capacidad de Bucarest para prepararse y responder ante posibles amenazas. Existe un creciente temor de que Rusia pueda atacar a un miembro de la OTAN si declara su victoria en Ucrania o logra una negociación muy ventajosa en el proceso abierto ahora por Estados Unidos. Los países que apoyan activamente a Kiev son considerados objetivos potenciales del expansionismo o la venganza de Vladimir Putin. 

Rumanía, miembro de la OTAN desde 2004, ha sido uno de los principales proveedores de ayuda militar a Ucrania, de ahí que sus temores sean entendibles. Su proximidad geográfica a Rusia también ha expuesto a la nación balcánica a incidentes provocativos, incluido uno en 2024, cuando se sospechó que un dron ruso cruzó el espacio aéreo rumano en ruta a Ucrania.

Ciolacu señaló que la seguridad en Europa del Este y la región del mar Negro es cada vez más inestable, con tensiones y nuevas amenazas alimentadas por la guerra en curso.

"La agresión de Rusia contra Ucrania continúa afectando la estabilidad de la región del Mar Negro, entre Europa, Asia y Oriente Medio", declaró. "Estos desafíos requieren una respuesta unificada y coordinada, y nuestro país desempeña un papel clave", concluye.