El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha instado a los aliados occidentales a aportar unos 30.000 millones de dólares antes de fin de año para reforzar la producción nacional de armamento, en medio de una creciente presión militar rusa y una disminución del apoyo exterior. 

"No estamos operando a plena capacidad", declaró el presidente ucraniano el martes en una rueda de prensa en Kiev recogida por Bloomberg, señalando que la cifra es una "idea aproximada" del coste necesario para sostener los objetivos bélicos del país.

La solicitud llega en un momento delicado para Ucrania, con un frente militar cada vez más tenso y el respaldo de EEUU debilitado bajo la presidencia de Donald Trump. Con las conversaciones de paz estancadas y sin avances concretos en la diplomacia internacional, Kiev está volcando su atención en fortalecer sus propios recursos. Pero, "la economía, devastada por la guerra, carece de las inversiones necesarias para aumentar la producción de armas", lamentó Zelenski.

El líder ucraniano también hizo hincapié en la urgencia de financiar nuevas reservas de drones militares. El objetivo es aumentar su número a 1.000 y triplicar las operaciones diarias contra objetivos rusos, de 100 a entre 300 y 500. "Eso demostrará a los rusos que percibirán la respuesta si nuestros socios nos ayudan", afirmó. "No se trata de capacidad de producción. Se trata de financiación", sentenció.

Zelenski planea llevar su propuesta a la próxima cumbre del G-7 en Alberta, Canadá, donde insistirá en utilizar los activos rusos congelados como fuente de financiación. "Hay activos rusos del país que nos trajo la guerra", dijo. El plan del G-7 contempla un paquete de préstamos de 56.500 millones de dólares respaldado por los intereses generados por 300.000 millones de dólares en activos rusos sancionados.

¡Mantente al día con El Huffpost! Sigue todas las noticias desde tu móvil en nuestra APP. Puedes descargarla tanto para Android como iOS.