El presidente de Chile planeaba hacer esta crisis desde hace varias semanas a causa de “los errores” de algunos de sus ministros, pero el refrendo constitucional la ha acelerado.
Los partidarios del no hablan de "radicalidad", de falta de diálogo y de dudas sobre el nuevo sistema. La falta de popularidad de Boric y la economía no han ayudado al sí.
"Hacer frente a estos importantes y urgentes desafíos requerirá prontos ajustes en nuestros equipos de Gobierno para enfrentar este nuevo período con renovados bríos".
El texto, debatido durante un año, debe sustituir el articulado vigente, de la dictadura de Pinochet. Un nuevo sistema, más igualdad y respeto a los pueblos originarios son sus claves.
Tras 10 años de problemas, se alivian los procesos y plazos para participar en los comicios. La actual ley electoral había llevado a una participación ridícula.
"Hace falta más respeto, más tolerancia y, a veces, más educación en la política", reclama el presidente andaluz, tras el escándalo de García Gallardo en Castilla y León.