¡A la calle, que ya es hora!

¡A la calle, que ya es hora!

No es lícito remitir a los ciudadanos, únicamente, a expresar su descontento en las próximas elecciones. Es razonable que cumplan con la única parte del "bloque del Estado de Derecho" que está inmediatamente a su alcance, sin modulaciones, y sin ser tildados de "tontos útiles" o similares.
"No en mi nombre"

"No en mi nombre"

"El Gobierno está jugando con fuego. No se puede confundir a los que protestan contra determinados funcionamientos del sistema democrático con los llamados antisistema", explica Vallespín, catedrático de Políticas de la UAM.