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Científicos estudian las extrañas muertes de los últimos tiburones blancos: asesinados por sus propios cerebros

Científicos estudian las extrañas muertes de los últimos tiburones blancos: asesinados por sus propios cerebros

Sigue siendo una incógnita.

Tiburones en el océanoGetty Images/Image Source

Un fenómeno muy llamativo se está produciendo en numerosos tiburones blancos en las playas de Norteamérica. Según informan científicos canadienses y estadounidenses, se han notificado un incremento llamativo en la muerte de esta especia en circunstancias muy llamativas.

De acuerdo con lo que exponen, la muerte de los tiburones presenta un motivo común: el agrandamiento (o inflamación) del cerebro, algo que ha llamado poderosamente la atención de todos los investigadores.

Los primeros casos se detectaron en el verano de 2023, cuando hallaron el cadáver de un tiburón blanco en una playa de Isla del Príncipe Eduardo, en Canadá. La conclusión a la que llegaron los expertos fue que el tiburón había muerto por una meningoencefalitis, que significa una inflamación del tejido cerebral.

Pero este caso vino sucedido de otros cuatro en las playas canadienses. "Tres de estos cinco animales parecen tener la misma enfermedad potencialmente infecciosa que afecta a su cerebro", aseguró al The New York Times la Dra. Megan Jones, patóloga veterinaria y directora regional de la Cooperativa Canadiense de Salud de la Fauna Silvestre (CWHC) .

La doctora asegura que "está ocurriendo algo importante". Algo que fue confirmado por Alisa Newton, veterinaria jefa de la organización de investigación de tiburones OCEARCH. Y es que, fue ella quien encontró el primer cadáver de tiburón blanco por esta razón en 2022. 

Tras esta sorpresa, decidieron enviar el tejido cerebral hallado al Laboratorio de Diagnóstico de Enfermedades Animales de Washington para analizar su secuencia genética. Otro factor que extrañó a los expertos fue que en más de tres décadas, el CWHC no había hallado el cadáver de un tiburón blanco muerto en la tierra.

Por último, destacaron que, aunque en casos anteriores, el motivo de dicha muerte era evidente (alguna infección por bacteria), en estos nuevos casos es muy distinto. Desde la Sociedad de Respuesta a los Animales Marinos, su directora ejecutiva, Tonya Wimmer, afirmó que detrás de esta oleada de muertes podría estar el aumento de la población, algo que provocaría que más ejemplares emergieran a la superficie.