El Gobierno busca dar estabilidad accionarial a Telefónica con un pacto con con BBVA y CaixaBank

El Gobierno busca dar estabilidad accionarial a Telefónica con un pacto con con BBVA y CaixaBank

El objetivo es articular un núcleo español de accionistas como medida de defensa ante movimientos de los saudíes, según adelanta 'El País'. Incluso aunque se formalizase una alianza de STC Group con Blackrock.

Imagen de archivo de la fachada de la sede de Telefónica en Madrid.Eduardo Parra/Europa Press via Getty Images

Tan solo unas horas después de el Gobierno haya movido ficha en el que ya es el nuevo capítulo del culebrón económico iniciado hace unos tres meses y medio con la compra del 9,9% del capital de Telefónica por parte del grupo saudí STC Group, ya se perfilan cuales serán los siguientes pasos del Ejecutivo para completar el blindaje de una empresa estratégica para España.

Si el Ejecutivo sorprendía el martes por la tarde con el anuncio de que había dado orde a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) para proceder a la adquisición del 10% de Telefónica, este miércoles El País adelanta que, una vez se formalice dicha compra, el objetivo será el de lograr un pacto con los dos principales accionistas de Telefónica, BBVA y La Caixa- así como la fundación de esta última-, con la meta de lograr estabilidad accionarial en la gran empresa de telecomunicaciones española. 

En este sentido, y según ha confirmado el citado medio con fuentes conocedoras de la operación, la clave está en adelantarse a una entrada en el Consejo de Administración a la que los saudíes de momento aún no habían puesto fecha en una serie de mensajes que fueron pasando de manifestar que no buscaban un asiento hasta confirmar que lo solicitarán proporcionalmente en base a su compra de capital. 

Evitar un desnivel de fuerzas en el consejo, incluso ante una alianza de los saudíes con Blackrock

De esta forma, articulando un pacto entre BBVA, La Caixa y el Gobierno, esta suerte de 'triunvirato empresarial' garantizaría que no se genere un desnivel de fuerzas con la entrada del representante de STC Group en el Consejo de Administración de Telefónica. Lo cierto es que a los saudíes le corresponderían hasta dos asientos en dicho órgano, según el 9,9% de capital adquirido. 

No obstante, con la compra del 10% por parte del Ejecutivo, esa desnivel se corregiría automáticamente e imperaría el actual escenario. Este pasa por el consejero dominical con el que cuentan CaixaBank-Criteria -dispone 6,03% del capital de Telefónica- o BBVA -el 4,87% del capital, por su parte-: Isidro Fainé y José María Abril, respectivamente. A ellos se suman los consejeros ejecutivos de la propia firma, es decir, el presidente José María Álvarez-Pallete y el consejero delegado, Ángel Vilá. A los que se suma el consejero externo, Javier de Paz.

Los restantes son 15 miembros independientes. En teoría, articular esa alianza a tres impediría incluso que los saudíes tomasen el control sumando fuerzas con el fondo de inversión Blackrock, que posee el 4,48% del capital.