Los narcos venezolanos del Tren de Aragua llegan a España: cae su primera célula
La Policía Nacional detiene a 13 personas en Barcelona, Girona, Madrid, A Coruña y Valencia. Los arrestados 'cocinaban' tusi en sus propios domicilios y también se dedicaban al tráfico de cocaína. Esta organización está en la diana de Trump.
La Policía Nacional ha detenido a 13 personas que presuntamente integraban la primera célula asentada en España del Tren de Aragua, una estructura criminal originaria de Venezuela expandida a otros países dedicada a ejecutar asesinatos, extorsiones, secuestros y traficar con drogas y personas.
La Dirección General de la Policía ha informado este viernes de esta operación, denominada Interciti, que tuvo una primera fase en marzo de 2024 cuando fue arrestado en Barcelona el hermano del líder internacional de la organización, que pretendía expandir su estructura.
En esta segunda fase, los agentes de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional han arrestado a 13 miembros del Tren de Aragua: ocho en Barcelona, dos en Madrid y otras tres detenciones en Girona, A Coruña y Valencia.
Los agentes han desmantelado también dos laboratorios dedicados a elaborar cocaína rosa, conocida como tusi, una actividad habitual de esta organización, y se han intervenido en cinco registros en Barcelona, Madrid, A Coruña y Girona diversas cantidades de drogas sintéticas, cocaína y una plantación de marihuana indoor.
Los arrestos son el resultado de las investigaciones realizadas por el grupo de trabajo creado ad hoc por la Policía Nacional para luchar contra la implantación de esta organización criminal en España, contando –en esta investigación- con el apoyo de la Policía Nacional de Colombia y el proyecto AMERIPOL-ELPACCTO 2.0 de la Unión Europea (UE).
La pista de un hermano
En marzo de 2024, los agentes detuvieron en Barcelona al hermano del Niño Guerrero, líder del clan a nivel internacional. Fue arrestado en virtud de una Orden Internacional de Detención interpuesta por las autoridades venezolanas por su presunta participación en delitos de terrorismo, tráfico de seres humanos, tráfico de armas, extorsión, blanqueo de capitales y asociación para delinquir.
Tras su localización y detención, los investigadores tiraron del hilo y se centraron en determinar si el arrestado, que se había instalado en España, intentaba implantar y expandir su estructura en este país, con el fin de operar a semejanza de como lo hace en los países del continente americano, de donde es originaria.
Fruto de esas pesquisas, los agentes detectaron un entramado de personas, ubicadas en diferentes partes del territorio nacional, con una distribución jerarquizada en la que el líder contaba con un lugarteniente con el que dirigía dos subestructuras.
Estas dos ramificaciones se dedicaban al "cocinado" de tusi en el interior de sus propios domicilios y su posterior distribución para financiarse, pero también al tráfico de cocaína que almacenaban previamente.
Los investigadores continúan las pesquisas de cara a detectar a otros miembros del entramado, por lo que continúan analizando los efectos intervenidos en los registros y, muy especialmente, las ramificaciones internacionales de esta organización que se caracteriza por su componente de actividad transnacional.
De dónde viene
El Tren de Aragua es un grupo que ha cobrado protagonismo en las últimas semanas porque está en la diana de los ataques a supuestas narcoembarcaciones por parte de Estados Unidos en aguas del Caribe y del Pacífico. La última conocida, esta misma madrugada, que eleva ya a 69 los supuestos traficantes asesinados. Washington aún no ha aportado prueba alguna de la pertenencia de estas personas a bandas de traficantes o armadas, lo que hace que la oposición denuncie estas muertes como "ejecuciones extrajudiciales".
Esta banda criminal nació en las cárceles de Venezuela, creció hasta cruzar sus alambradas, extenderse en barrios, pueblos y ciudades, correr por América Latina usando las rutas de la inmigración y, así, llegar hasta EEUU, donde se desconoce su penetración real pero donde Trump la usó profusamente en su campaña electoral de 2024.
Se considera que tuvo su génesis en el sindicato de obreros que trabajaban en la construcción del tramo del Ferrocarril de Venezuela que recorría los estados de Aragua y Carabobo, de ahí su autodenominación como Tren de Aragua. Tras el inicio del proyecto en 2005, el sindicato cobraba por la asignación de puestos de trabajo y extorsionaba a los contratistas. El grupo fue ampliando sus actividades criminales y cuando la construcción se paralizó en 2011, el sindicato ya actuaba como una banda criminal.
Sin embargo, el 'Tren de Aragua', como se le conoce hoy en día, no se consolidó hasta 2013, cuando Héctor Rustherford Guerrero Flores, el Niño Guerrero, fue encarcelado en la prisión de Tocorón y estableció alianzas con miembros del sindicato. Desde 2018, el grupo se ha expandido rápidamente por el continente americano a lo largo de la ruta que recorren los migrantes venezolanos. De hecho, la banda está asentada ya en ciudades de Colombia, Perú, Chile y otros países. Allí escaló rápidamente en la jerarquía penitenciaria hasta convertirse en Pran, como se les conoce a los líderes carcelarios en Venezuela.
La organización Insight Crime, un tanque de pensamiento sobre delincuencia y criminalidad con sede en Washington, ha elaborado un informe en el que repasa su evolución y la define claramente. "El Tren de Aragua es la estructura criminal más poderosa de Venezuela y el único grupo local que ha logrado afianzarse en el extranjero. El grupo pasó de ser una banda carcelaria a convertirse en una amenaza de naturaleza transnacional con un amplio portafolio criminal", exponen sus expertos.