Nuevo choque Cuerpo-Díaz, ahora por los permisos por fallecimiento: todos sus cruces de mensajes
El ministro de Economía ha frenado los planes de la vicepresidenta segunda y titular de Trabajo, que quiere elevar a 10 días el permiso retribuido por la muerte de un familiar. Llueve sobre mojado.

Una nueva vieja historia. Carlos Cuerpo y Yolanda Díaz protagonizan este jueves un nuevo desencuentro verbal y a distancia a cuenta de la promesa de aumentar los permisos por fallecimiento de seres queridos. El avance hecho por la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo ha sido rápidamente frenado por el titular de Economía.
Por la mañana, Yolanda Díaz anunciaba que su ministerio presentará una norma para modificar el Estatuto de los Trabajadores y elevar a hasta 10 días los permisos retribuidos por fallecimiento de un familiar. En paralelo, adelantaba un nuevo permiso de un día por cuidados paliativos también de familiares.
"Nadie puede ir bien a trabajar a los dos días del fallecimiento de un padre, de una madre, de un hijo, de una hija, de un amigo. Nadie puede hacerlo bien. Nadie", ha expuesto la ministra en un Desayuno Informativo de Europa Press y haciendo referencia al marco legal actual.
En detalle, la norma vigente hoy establece dos días de permiso retribuido de por el fallecimiento de un familiar de primer (Padre y madre, hijo e hija, cónyuge o pareja de hecho registrada, suegro y suegra) o segundo grado (hermano y hermana, abuelo y abuela, nieto y nieta, cuñado y cuñada). Esto incluye tanto el vínculo por consanguinidad (familia directa) o por afinidad (el ligado a matrimonios o parejas de hecho). Dichos permisos se elevan a cuatro días si hay necesidad de desplazarse a causa del deceso.
Las reacciones han sido inmediatas. Muchos trabajadores lo han celebrado como una medida de humanidad, aunque también se han registrados dudas sobre la viabilidad de tamaño permiso. La clase empresarial ha alzado la voz, especialmente la patronal y en voz de Antonio Garamendi, afeando "otra" decisión de Yolanda Díaz sin haberles consultado.
Y en esta línea ha intervenido Carlos Cuerpo, que desde Luxemburgo ha matizado el anuncio hecho por su vicepresidenta segunda y compañera de Consejo de Ministros. Para el titular de Economía esta medida requiere de "equilibrio" y, especialmente, de que se haga "de la mano de las empresas".
Cuerpo sí ha matizado que tanto él como el Ejecutivo en su conjunto mantienen una "constante búsqueda" para "seguir conquistando derechos para los trabajadores y seguir mejorando las condiciones laborales".
El choque entre Cuerpo y Díaz no es algo novedoso. Ambos miembros del Gobierno ya evidenciaron sus diferencias, resueltas al menos parcialmente en varias reuniones privadas. Pero a comienzos de año la distancia fue evidente a cuenta de la disparidad de criterios en la posible rebaja de la jornada laboral a 37'5 horas, muy defendida por Yolanda Díaz.
"Que un ministro socialista se posicione en contra de un acuerdo con los sindicatos es algo que hay que explicar a los votantes progresistas", apuntaba en enero, alegando que que "lo firmado es sagrado" y que hasta ahora "jamás" un ministro "se había opuesto a un acuerdo de diálogo social con los sindicatos". Tanto fue, que llegó a decir de Carlos Cuerpo que posicionarse "del lado de la patronal" es "casi de mala persona", ante las dudas del ministro en el fondo y forma de la propuesta.
Meses después, ya a finales de septiembre, hubo otro cruce, a cuenta esta vez del registro horario en las empresas, el 'plan b' ideado por Trabajo ante la imposibilidad de sacar en el Congreso la reducción de la jornada laboral.
Aunque Díaz la presentó como medida de urgencia, fue Cuerpo el que volvió a frenar sus planes, bajo la explicación a los medios de que "anticipar las decisiones y los proyectos del Consejo de Ministros no me corresponde". "Veremos", remataba en una entrevista en RNE.
