Bosch impone jornada laboral de 4 días a sus trabajadores para escapar de la ruina
Entrará en vigor a partir del 1 de marzo.
La recesión que enfrenta Alemania comienza a cobrarse sus primeras víctimas, entre las que se encuentra la compañía multinacional de ingeniería y tecnología Bosch, el mayor productor de componentes de automovilismo del mundo. La empresa anunció que llevará a cabo una reducción de la jornada laboral de sus trabajadores a las 35 horas semanales, lo que supondrá una jornada de cuatro días.
En total, esta medida afectará a al menos 10.000 trabajadores, la mayoría situados en fábricas en Alemania, que tendrán que acatar este recorte en su jornada, pero también en sus salarios. La empresa alemana ha defendido que es demasiado pronto para conocer los efectos que tendrá esta medida en las condiciones de sus trabajadores.
La iniciativa comenzará a estar en marcha a partir del 1 de marzo, momento en el que sus empleados verán reducida su jornada laboral entre 38 y 40 horas semanales. Uno de los portavoces de la empresa ha explicado que la medida se ha tomado debido a la "difícil situación económica", según ha citado 'Fortune'. Además, la compañía espera recortar 5.500 puestos, la mayoría de ellos (3.800) en su mercado natal.
En este contexto, cabe destacar los grandes retos a los que se enfrenta la industria automotriz, como la caída de la demanda y el incremento de la competencia de los modelos chinos, mucho más asequibles. "La industria automotriz está sufriendo de una sobrecapacidad significativa", destacó Bosch en un comunicado, que añadió que el número real de reducciones se resolverá en negociaciones con sindicatos.
El mes pasado, el presidente de la compañía, Stefan Hartung, reconoció que la compañía no llegaría a los objetivos previstos para 2024 debido a los grandes problemas que enfrenta hoy en día la industria automovilística, sobre todo con Volkswagen.