Este es el único país del mundo sin territorio
Su propósito inicial era proporcionar atención médica a los peregrinos cristianos que viajaban a Tierra Santa.

En el vasto y diverso mapa político del mundo, existe una entidad única que desafía las convenciones tradicionales de lo que constituye un país. La Soberana Orden Militar y Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, de Rodas y de Malta, comúnmente conocida como la Orden de Malta, es un caso excepcional de un estado sin territorio. Fundada en el siglo XI, esta organización ha evolucionado a lo largo de los siglos, manteniendo su relevancia y adaptándose a los cambios globales, mientras sigue careciendo de un territorio propio.
La Orden de Malta es reconocida internacionalmente y mantiene relaciones diplomáticas con más de 100 países. A pesar de no tener un territorio físico, la Orden opera como un estado soberano, con su propio gobierno, leyes y una misión centrada en la ayuda humanitaria y la defensa de la fe.
La historia de la Orden de Malta se remonta a las Cruzadas, cuando fue fundada en Jerusalén en el siglo XI por el religioso Gerardo Sasso. Su propósito inicial era proporcionar atención médica a los peregrinos cristianos que viajaban a Tierra Santa. La primera sede de la Orden se estableció en el castillo del Crac de los Caballeros, en lo que hoy es Siria. Con el tiempo, la Orden expandió su misión para incluir la defensa de los cristianos en la región.
En 1291, tras la caída de Acre, la Orden se trasladó a Chipre y luego a Rodas en 1310. Durante su estancia en Rodas, la Orden adquirió gran poder y riqueza, incluso acuñando su propia moneda. Sin embargo, en 1522, los turcos otomanos sitiaron la isla y forzaron a los caballeros a rendirse. La Orden se trasladó entonces a Malta, donde resistió nuevos ataques hasta que las tropas napoleónicas tomaron el archipiélago en 1798.
A pesar de no tener un territorio propio, la Orden de Malta funciona como un estado soberano con una estructura de gobierno compleja. Su sede se encuentra en Roma desde 1834, y cuenta con varios órganos de gobierno, incluyendo el Consejo Pleno de Estado, el Capítulo General, el Soberano Consejo, el Tribunal de Cuentas, los Tribunales Magistrales y la Abogacía del Estado. El Gran Maestre, elegido por el Consejo Pleno de Estado, actúa como jefe de estado y dirige la Orden junto con otros altos funcionarios como el Gran Comendador, el Gran Canciller, el Gran Hospitalario y el Recibidor del Común Tesoro.
La Orden de Malta tiene alrededor de 13,000 miembros y 80,000 voluntarios que participan en diversas misiones humanitarias alrededor del mundo. Su misión se resume en el lema "Tuitio Fidei et Obsequium Pauperum" (defensa de la fe y asistencia a los pobres), y sus actividades incluyen la gestión de hospitales, centros médicos y programas de ayuda en situaciones de emergencia.
La Orden de Malta mantiene relaciones diplomáticas con más de 100 países y tiene embajadas en todo el mundo. Aunque no todos los estados reconocen a la Orden como un país soberano debido a su falta de territorio, muchos la consideran una entidad con estatus especial. La Orden también tiene un asiento permanente como observador en la ONU, lo que le permite participar en debates y colaborar en iniciativas internacionales.