Ordenan expropiar 40 fincas por el esperado puente que une España con Portugal
Será un puente de 160 metros de longitud y 11,5 metros de ancho, sostenido por dos arcos de hormigón sin pilares en el cauce del río Seve.
El viaducto internacional que conectará la localidad cacereña de Cedillo con la portuguesa Montalvão avanza hacia su materialización, con la expectativa de que las obras puedan estar finalizadas a finales de 2025. La Cámara Municipal de Nisa ha dado un paso clave al oficializar la expropiación de 40 fincas, que suman cerca de 60.000 metros cuadrados, como parte de los trámites necesarios para la ejecución del proyecto.
La presidenta del Consejo Municipal de Nisa, Maria Idalina Alves Trindade, ha destacado la importancia de la reciente declaración de utilidad pública de estas expropiaciones, autorizada con carácter de urgencia por la Asamblea Municipal. Con esta medida, se han completado los trámites dependientes de la Cámara Municipal, trasladando ahora la responsabilidad al Ministerio de Cohesión Territorial de Portugal, que deberá registrar la solicitud antes de lanzar la licitación pública.
El proyecto, con un presupuesto de 11.938.286 euros financiado por el Plan de Resiliencia y Recuperación de Portugal (PRR), incluye la construcción de un puente de 160 metros de longitud y 11,5 metros de ancho, sostenido por dos arcos de hormigón sin pilares en el cauce del río Sever. Además, contempla un nuevo corredor de acceso de 700 metros en la orilla portuguesa.
La alcaldesa Idalina Trindade ha expresado su optimismo: “Estamos cada vez más cerca de hacer este sueño realidad y convertir este puente en un punto de encuentro” entre Extremadura y Portugal, solucionando una histórica desconexión en esta zona de la Raya.
En octubre, el Ministerio de Asuntos Exteriores de España desbloqueó el convenio entre los gobiernos español y portugués, un paso fundamental para que el proyecto avance. Este acuerdo permitirá reducir un trayecto que actualmente implica recorrer 130 kilómetros para conectar dos localidades separadas por apenas 13.
La obra, que lleva décadas en espera, responde a una demanda histórica de los habitantes de Cedillo y Montalvão. Desde 1995, cuando se restringió el paso por la presa de Cedillo, el pueblo extremeño quedó incomunicado del país vecino. Trindade se ha comprometido a inaugurar el puente antes de que finalice su mandato en 2025, aunque el inicio de las obras deberá producirse pronto para cumplir con los plazos. Las instituciones confían en que la Unión Europea sea flexible con los tiempos de financiación.
El proyecto promete ser un hito en la conexión entre ambos países, facilitando la movilidad y estrechando lazos en una región que, hasta ahora, se ha visto condicionada por la falta de infraestructuras adecuadas.