Una experta en protocolo avisa de que lo que muchísima gente hace con el ticket regalo es un error
La clave: la discreción.

La Navidad es una época de amor, felicidad, regalos... y gastos. Y muchos gastos. Según un reciente informe de la Organización de Consumidores y Usuario (OCU), cada español se gasta en esta época 796 euros, de los que casi la mitad se destina a regalos.
De acuerdo con ese mismo organismo, solo en regalos los encuestados prevén gastar, de media, 370 euros, algo más en Reyes (192 euros) que en Navidad (178). Y en cuanto entran en juego esos presentes llegan los quebraderos de cabeza: ¿qué regalar? ¿gustará la idea?
Ahí tienen un papel fundamental los tickets regalo, que permiten cambiar los regalos por otros sin conocer el precio del producto. Pero atención: María José Gómez y Verdú, experta en Protocolo y Etiqueta, ha advertido de que, según las normas de educación, muchas personas cometen errores a la hora de dar estos tickets junto a los regalos.
En primer lugar, la experta avisa de que el ticket regalo nunca debe ir a la vista o suelto junto con el regalo: "Lo mejor es introducirlo dentro de un sobrecito de forma discreta".
Una clave: entregarlo sin dar explicaciones
Además, insiste en que nunca se debe decir algo del tipo: "Te doy el ticket regalo por si no te gusta y lo quieres cambiar".
"Se entrega junto al regalo sin dar explicaciones. Solo lo entregaremos si es necesario: si lo que regalamos es ropa, zapatos o productos muy personales, pero nunca hacer entrega de un ticket regalo si hablamos de regalos simbólicos o artesanales. Que, por cierto, son aquellos que debemos hacer si la persona nos invita un día a comer a su casa", explica Gómez y Verdú
Otra clave: nada de hacer investigación posterior
La experta recomienda hacer todo "siempre con discreción absoluta": "Es el receptor del regalo quien decide si lo desea cambiar o no. Y por la parte de aquella persona que regala nunca luego no tiene que haber una intención investigativa para saber si se quedó o cambió el regalo".
