El Barça y el Atleti ganan en el descuento a Benfica (4-5) y Leverkusen (2-1) tras firmar dos remontadas para recordar
Los culés llegaron a ir perdiendo 3-1 y los colchoneros jugaron desde el minuto 25 con uno menos tras la expulsión de Pablo Barrios.

Noche loca. No hay otra forma de definir los dos partidos de Champions que han disputado este martes el FC Barcelona y el Atlético de Madrid ante el Benfica y el Bayer Leverkusen, respectivamente.
Los culés, tras ir perdiendo 3-1 a la media hora en Lisboa ante el Benfica, han logrado vencer 4-5 al conjunto luso con un gol en el minuto 96 de Raphinha y han obtenido la clasificación matemática a los octavos de final de la máxima competición europea.
Por su parte, los colchoneros han conseguido levantar un partido que se les puso totalmente en contra en el minuto 25 tras la expulsión de Pablo Barrios. Justo antes del descanso, Piero Hincapié adelantó al Bayer Leverkusen. Pero dos picotazos de 'la araña' Julián Álvarez en el 52 y en el 90 hicieron que tres puntos valiosísimos (que aúpan al Atlético de Madrid provisionalmente hasta la tercera posición) se quedaran en Madrid.
Benfica 4-5 FC Barcelona
El FC Barcelona ganó este martes al Benfica (4-5) en el Estádio da Luz, en la séptima jornada de la Fase Liga de la Liga de Campeones, en un duelo loco con remontada blaugrana con un postrero gol de Raphinha en la última jugada para sellar el billete directo a los octavos de final de esta 'Champions' donde el Barça tiene pegada y la fortuna que le esquiva últimamente en LaLiga EA Sports.
Partido loco, con 9 goles, 3 penaltis, varios errores clamorosos en ambos bandos y la sensación de que tanto Benfica como Barça podían ganar. Pero el triunfo, con esa remontada de un Barça que perdía 4-2 en el minuto 77 y que tuvo en los cambios tácticos de Flick una de las claves del éxito, deja al Barça ya virtualmente en los octavos de final de la 'Champions' con todavía un partido por jugar.
Raphinha, en una contra de manual empezada por Ferran Torres, uno de los comodines del técnico alemán del Barça, puso el 4-5 en el marcador e hizo estallar de alegría a todos en la expedición blaugrana. Una remontada épica que dejó en susto los dos errores de Szczesny en la primera parte y que hizo estallar a un Benfica que no encajó bien la derrota, aunque todavía dependen de sí mismos para clasificarse para los 'Play-offs'. El Barça, por su parte, ya está en octavos.
El partido prometía de inicio, con una ocasión para Lamine Yamal en el primer minuto y el gol del Benfica en el 2'. Sí, una respuesta inmediata a las intenciones ofensivas del Barça por parte de un Benfica que hilvanó una gran jugada, con buen centro del español Álvaro Carreras que remató con potencia Pavlidis, que de manera fortuita pisó a Pau Cubarsí tras el remate. Estalló da Luz y no era para menos. Y eso que en el 6' Aursnes perdonó el segundo.
Sin ser el escenario ideado por Hansi Flick, el Barça no le perdió el pulso al partido y Robert Lewandowski, pese a empezar impreciso haciendo de pivote y pantalla, tuvo una buena segunda ocasión para los 'culers', que debían remar a contracorriente de inicio pero sabiendo que su presencia en los octavos no corría peligro, ya que una posible derrota dejaba igualmente todo abierto para la jornada final.
Aún así, la directriz era ganar y sellar ya el pase. Y en ese camino hacia la remontada ayudó que el VAR sí viera un claro pisotón de Tomás Araújo a Alejandro Balde dentro del área. El colegiado neerlandés, en pantalla, apreció penalti y Robert Lewandowski, con sus engaños previos ya habituales, superó al guardameta Trubin para empatar el choque, que estaba loco, en el 13'.
El Barça, con el empate, se hizo con el balón e intentó bajarle una marcha al duelo, pero dos acciones desafortunadas del portero polaco Wojciech Szczesny cambiaron todo. De un escenario en el que se buscaba el 1-2, con Trubin salvando a los suyos con una mano de grandes reflejos en un mano a mano con Gavi, se pasó al 3-1 y al 'hat-trick' de un Pavlidis que llevaba tan sólo 1 gol en la 'Champions'.
Primero, porque el griego recogió un balón rechazado para marcar a placer, a portería vacía, después de que Szczesny saliera tarde y mal a por un balón suelto al que llegó Alejandro Balde. De hecho, el meta arrolló a su compañero y ambos, dolidos en el suelo, no pudieron ver el gol. Ocho minutos despúes, demostrando que las salidas no son lo suyo, el veterano portero cometió penalti --protestado pero revisado en el VAR-- al salir a por todas a cubrir huecos ante Kerem Aktürkoglu, que voló. Y Pavlidis no desaprovechó la oportunidad de marcar el 'hat-trick' desde el punto de penalti.
Por suerte para los blaugranas, el balón siguió siendo para los de Flick y volvió la calma, propiciada porque el Benfica se metió más atrás, satisfecho con su inesperada renta de goles. Y el Barça, con paciencia, buscó acercarse en el marcador y pudo hacerlo antes del descanso, pero el tiro de primeras de Raphinha a centro de Lewandowski se marchó fuera. Podría haber controlado y recortado, pero lo vio claro y su tiro no se fue demasiado lejos del palo. Pero no entró y el billete a octavos, al descanso, estaba a 3 goles.
Sin cambios en ningún equipo, el partido se reanudó bajo una lluvia cada vez más intensa, como la que recibió al equipo catalán en Lisboa el lunes. Y en lo futbolístico el Barça buscaba someter a una borrasca a los lisboetas, pero Lamine Yamal, de rosca, no encontró en su intento el gol. La opción de meter un segundo tanto en los primeros minutos se esfumaba, y la reacción debía ir por otros derroteros.
Hansi Flick optó por dar entrada a Frenkie de Jong y a Fermín López, en lugar de Marc Casadó y de Gavi. Un poco de aire fresco para el centro del campo, si bien el problema del Barça en Lisboa, más allá de las cantadas atrás de la primera parte, era que no había remate. Y, cuando esa última acción falla, siempre puedes recurrir a la suerte, que llegó en forma de error compensatorio de Trubin que, despejando un balón controlado, envió un balón bajo que Raphinha interceptó de cabeza, demostrando tener fuerte el cuello, yendo su rechace directo a portería para dar alas al Barça (3-2).
No estaba siendo la noche del Barça y no parecía el momento para sellar ningún billete a octavos. Y prueba de ello fue que poco después de recibir ese aliento, todo se fue al traste con un autogol de Ronald Araújo, que forzado metió el pie en un centro lateral bastante raso superando por alto a un Szczesny que estaba vez sí iba a hacerse con el balón. No fue el día ni del polaco ni del uruguayo.
Pero el Estádio da Luz todavía tenía pensado un giro de guión más, uno que iba a perjudicar a su equipo y a catalogar del todo de 'loco' este partido. Como primer plato, otro penalti --que provocó Lamine Yamal-- transformado por Robert Lewandowski en el 78' y, en el 87', un Eric Garcia que fue recurso de última hora de Flick, vestido de Sergi Roberto en aquella épica goleada al PSG, permitió con un remate de cabeza empatar el choque. Pero el protagonismo debía ser, y fue, para el 'capi' Raphinha y su culminación de la remontada.
Atlético de Madrid 2-1 Bayer Leverkusen
El Atlético de Madrid ha vencido este martes por 2-1 al Bayer Leverkusen en la jornada 7 de la liguilla de la Liga de Campeones, gracias a dos goles del delantero argentino Julián Álvarez y remontada incluida, para así acercar mucho el propósito de los colchoneros de meterse directos en los octavos de final del torneo.
En el Riyadh Air Metropolitano, la lluvia caída en la capital de España dio tregua al inicio del partido, donde los visitantes tuvieron la primera ocasión en un tiro desviado de Exequiel Palacios desde fuera del área. La respuesta tampoco tardó, tras un pase en largo buscando a Giuliano Simeone y en cuyo rechace Julián Álvarez disparó flojo.
Volcó entonces el Leverkusen los ataques hacia su banda izquierda, con Alejandro Grimaldo y Florian Wirtz combinando para buscar cosquillas al 'Cholito' Simeone y sobre todo a Nahuel Molina. El propio Grimaldo mandó arriba un derechazo en el área rojiblanca y luego generó otra oportunidad para Palacios, que tampoco inquietó a Jan Oblak.
No obstante, el portero local empezó a acumular tarea pasado el cuarto de hora, cuando Granit Xhaka halló otro hueco para ver a Grimaldo al galope por el lado izquierdo; a la espalda del marcaje, el carrilero español pisó área y asistió rápido a un Nathan Tella que remachó al fondo de las mallas, pero anulado todo por fuera de juego.
El dominio era del Leverkusen, que volvió a incordiar a Oblak con un derechazo de Tella desde la frontal del área, aunque bien repelido por el guardameta esloveno. Sin dilación, él y sus compañeros vivieron un contratiempo después de la expulsión de Pablo Barrios por roja directa a causa de una entrada a Nordi Mukiele, bajo consulta del árbitro al VAR.
Un arreón de la 'Araña' Álvarez, por la banda derecha, fue el escaso bagaje ofensivo del Atlético en la primera media hora, y donde no movió ficha su entrenador pese a estar con un jugador menos. Así, Diego Pablo Simeone veía cómo Wirtz campaba a sus anchas por varias zonas del campo, como referente de un equipo al que solo le faltaba pólvora para marcar.
El técnico rival, Xabi Alonso, también era paciente mientras el reloj consumía una primera mitad espesa. Un zurdazo muy alto de Javi Galán en la corona del área, en el 37', apenas animó a unas gradas más pendientes de protestar al árbitro italiano Davide Massa. Para colmo de la afición colchonera, el Leverkusen abrió el marcador justo antes del descanso.
Jeremie Frimpong se marchó de Galán y su centro raso fue rematado por Wirtz, taponado de manera primordial por Josema Giménez; pero la pelota siguió viva y en el pico derecho del área local cayó a pies de Mukiele, quien recortó sobre Antoine Grizemann y la bombeó al segundo palo para que Piero Hincapié a la espalda de Giuliano cabecease cruzado a gol.
En la reanudación, su padre Diego Pablo cambió a Galán por Reinildo, oxigenando el costado izquierdo. A raíz de un vaivén, por esa zona vio Griezmann una vía hacia el desmarque de un Álvarez que ganó a Jonathan Tah su esprint por ímpetu; así, la 'Araña' alcanzó el área alemana y definió con un tiro cruzado para establecer el 1-1 en el minuto 52.
Poco pulcro ese zurdszo del dorsal 19 colchonero, pero ajustado lo suficiente como para que no llegase Matej Kovar con su estirada. Casi de la nada, el Atlético había igualado un escenario poco halagüeño y eso envalentonó al estadio. Se notó algo más tarde durante un contragolpe de Álvarez y en el que Wirtz pudo haber visto la segunda tarjeta amarilla.
Se la perdonó Massa, como también perdonó mayor castigo para Guiliano en una amarilla vista por una entrada fea y fruto de un resbalón. Había tensión y el Leverkusen quiso sacar rédito moviendo de lado a lado el esférico, hasta resquebrajar una zaga bien plantada en las cecanías de Oblak.
Para ayudar a Rodrigo de Paul lanzando contras, Griezmann enganchaba entre líneas a la vez que Reinildo neutralizaba a Frimpong por su banda. En el lado opuesto, Giuliano asomó a tiempo para regatear a Hincapié y en la línea de fondo provocó una falta cuando se dirigía al área, por lo que Massa enseñó la segunda amarilla al lateral ecuatoriano.
De cara al desenlace, el Atleti apretó e hizo dos sustituciones más, Samu Lino por Giuliano y Ángel Correa por el 'Principito' Griezmann. En el Leverkusen, apostó Xabi Alonso por Aleix García en el lugar de Wirtz, pero como preludio al 2-1 anotado por Álvarez en otro lance sin aparente peligro.
Correa peleó el bote de un balonazo y entre los centrales se generó hueco para asistir a la llegada de la 'Araña' a la espalda de otro mal colocado defensa visitante. El delantero argentino esquivó con temple la salida de Kovar a ras de suelo y con poco ángulo marcó su segundo tanto de la noche con un disparo raudo y también raso.
Salió Robin Le Normand en el tiempo de descuento para cerrar espacios y desesperar a un Leverkusen que consumó su derrota, cuando tan cerca había tenido puntuar en el Metropolitano. De este modo, los pupilos de Xabi Alonso se quedan de momento sexto con 13 puntos, dos por debajo de un Atleti que acumula ya 15 puntos y acaricia estar fijo en el 'top 8'.