Cómo abrazar tu "yo" más natural

Cómo abrazar tu "yo" más natural

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¿Has hecho alguna vez algo aunque no querías solo porque es lo que tenías que hacer? Posiblemente la respuesta sea sí, y posiblemente no te haya quedado otro remedio, pero hay días en los que no está de más dejar de lado los "podría, habría, debería" y simplemente abrazar tu "yo" más natural.

Dedicar un día a los pequeños placeres que te hacen feliz, sin necesidad de fingir ni agradar a nadie. Te servirá para relajarte y para hacerte entrar en un modo natural y, como diría Paquita Salas, "zen total".

Deja la colada sin hacer y sal al aire libre

Si eres una persona ordenada y sueles llevar las tareas de la casa al día, puedes permitirte aplazar esa colada que tanta pereza te da hacer al llegar a casa, y salir a disfrutar del aire libre. Si hacer deporte te sienta bien, ¿por qué no dedicar una tarde al yoga? Leer un libro en una terraza, pasear por el parque... haz lo que más te apetezca y entre en modo relax.

Date un respiro y disfruta de un buen té

  honestHONEST

La rutina diaria puede ser puro trajín. Entre el trabajo, moverse de un lado a otro y llegar a casa y hacer mil cosas pendientes, a veces es muy difícil sacar tiempo para uno mismo. Esa es la mala noticia, la buena es que deberías obligarte a hacerlo. Reserva aunque sea un cuarto de hora para ti y date un respiro. Los nuevos tés de Honest, son perfectos para el momento de desconexión que elijas, ya sea a media mañana, por la tarde o mientras lees un buen libro. Y además tienes tres sabores para elegir: melocotón, limón y frambuesa.

Aparca las planchas del pelo

Si para ti es un placer plancharte el pelo todos los días, retiramos lo dicho. Cierto es que el acabado suele ser maravilloso, pero hay mañanas en las que salir con el pelo al natural resulta tentador. Si te animas puedes utilizar esos minutos extra para remolonear un poco más en la cama y prepararte un desayuno más apetitoso. Además, la salud de tu pelo te lo agradecerá.

Come ese postre que tanto te apetece

Pasarse con el azúcar es un problema muy serio por las enfermedades y problemas de salud que acarrea. Si llevas semanas soñando con ese delicioso bizcocho que hace tu abuela o con esas galletas caseras que estás deseando catar desde que las metes en el horno, date el capricho. Siempre que sea de forma esporádica, hecho en casa y con ingredientes de calidad saborear este postre puede ser una merecida recompensa tras un día duro.