Dimite el responsable de Comunicación de la Empresa Municipal de Vivienda, en pleno escándalo por el espionaje a Ayuso

Dimite el responsable de Comunicación de la Empresa Municipal de Vivienda, en pleno escándalo por el espionaje a Ayuso

David Fernández desvincula su salida con la polémica, según avanza 'Cadena SER'.

José Luis Martínez-Almeida e Isabel Díaz de Ayuso.Europa Press News via Getty Images

El responsable de Comunicación de la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo del Ayuntamiento de Madrid (EMVS) ha presentado su dimisión en medio de la polémica por los presuntos mecanismos de espionaje contra la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso.

Tal y como ha avanzado Cadena SER, David Fernández quería abandonar este puesto ya desde hace un mes y, finalmente, su salida será efectiva este martes. En su justificación, Fernández ha asegurado que se va por una mejor oferta laboral y desvincula así su salida con el escándalo por el espionaje.

Esta empresa municipal fue uno de los nombres clave en el presunto espionaje a Ayuso. Tras conocer los señalamientos, el propio alcalde José Luis Martínez-Almeida encargó una investigación para conocer si se contrató a un detective desde la EMVS.

Fue el presidente de la empresa municipal, Álvaro González, quien llamó al mismo y le negó que hubiera ocurrido siquiera tal encargo. Sin embargo, el concejal de Desarrollo Urbano y vicepresidente de la EMVS, Mariano Fuentes, de Ciudadanos, alertó de que González había “desmentido” las palabras del regidor al no reconocer la investigación llevada a cabo.

Después, el alcalde reiteró sus palabras en el pleno municipal monográfico sobre este asunto. “Se contactó con personas de la EMVS para ver si se produjo un contacto. Se negó. Se revisó la contratación de la empresa de la EMVS durante los dos últimos años para ver si hubo un encargo o gasto de fondos públicos. Ni el detective reconoce que hubo reunión, ni personas de la EMVS reconocen contacto, ni encargo”, defendió.

Quien fuera director general de Coordinación de Alcaldía, Ángel Carromero, dimitía el mismo día en el que Almeida dio las primeras explicaciones “para preservar a la institución y para poder defenderse mejor”. Días después, se dio de baja como afiliado al Partido Popular.