Los nueve 'looks' de los Oscar que tienes que ver sí o sí

Los nueve 'looks' de los Oscar que tienes que ver sí o sí

Los premios han apostado por una alfombra roja presencial y los invitados han cumplido.

Yuh-Jung Youn, LaKeith Stanfield y Zendaya.GETTY

Las normas eran claras: nada de pijamas ni chándal. Los nominados y presentadores a la 93ª edición de los Oscar han querido recuperar la magia del cine y de las entregas de premios manteniendo una alfombra roja tradicional

A pesar de que ha sido reducida y algunos nominados han posado desde Londres o Sidney, los invitados a los premios lo han dado todo y han elegido sus mejores galas para pisar la alfombra roja de Union Station. En esta ocasión las siluetas de sirena y los trajes de princesa han dejado paso a más riesgo y personalidad.

Esto es lo que ha dado de sí la alfombra roja, resumido en 9 momentazos.

La estrella: Zendaya

La actriz y su estilista, Law Roach, son una de las duplas más exitosas de las alfombras rojas por conseguir montar un pequeña producción en cada aparición. Zendaya vistió un vestido de Alta Costura de Valentino en amarillo neón con aberturas en el abdomen. Más allá de la prenda, posó como la estrella que es y lució unas espectaculares joyas de Bulgari capaces de revivir a cualquiera.

Hacer historia en deportivas

  Chloe ZhaoHandout via A.M.P.A.S. via Getty Images

Chloé Zhao se ha convertido en la segunda mujer en ganar el Oscar a la Mejor dirección y no lo ha hecho con un vestido de princesa. La cineasta china paseó por la alfombra roja con un vestido beige de punto, sus habituales trenzas y unas deportivas blancas.

Carey Mulligan: una falda para tiempos de distancia social

  Carey Mulligan, de Valentino Alta CosturaPool via Getty Images

La protagonista de Una joven prometedora se vistió de estatuilla con este Valentino de Alta Costura que se colaba en cada plano de la ceremonia. La actriz eligió la falda perfecta para una gala en la que los invitados han estado más separados que de costumbre.

El atrevimiento: Tiara Thomas

  Tiara ThomasHandout via A.M.P.A.S. via Getty Images

La cantante y compositora, ganadora por su trabajo en Judas y el mesías negro, ha vestido un traje blanco poco habitual para los Oscar. De escote pronunciado, con plumas y coronado por un espectacular colgante. Además, ha aprovechado el evento para elegir una diseñadora independiente, Jovana Louis, negra y de origen haitiano.

La personalidad: Lakeith Stanfield

Defender el mono de Saint Laurent que Lakeith Stanfield se plantó para ir a los Oscar requiere de altas dosis de personalidad. De estilo años 70 y con una camisa de grandes solapas blancas, demostró que no se puede derrochar más estilo propio.

El Hollywood más clásico: Amanda Seyfried

  Amanda SeyfriedHandout via A.M.P.A.S. via Getty Images

No hay gala de los Oscar si un momento al más puro antiguo Hollywood. En esta edición ha sido Amanda Seyfried la que ha tirado de elegancia clásica con un diseño rojo de Armani Privé, plisado y con un pronunciadísimo escote.

El viaje a los 2000: Andra Day

  Andra Day, de Vera WangChris Pizzello via AP

Los Oscar no son unos premios en los que se enseña piel. Mucho más conservadores que los Globos de Oro, tradicionalmente las actrices han preferido ir correctas y no pasarse de frenada. Andra Day decidió hacer todo lo contrario y apostar por un vestido dorado de Vera Wang que se podría haber puesto Rihanna en 2005.

La elegancia: Youn Yuh-jung

  Yuh-Jung YounHandout via A.M.P.A.S. via Getty Images

Ganadora del Oscar a la Mejor actriz de reparto, Youn Yuh-jung ha demostrado que no hace falta nada más que tener clase para triunfar en la alfombra roja. Con un diseño azul marino, de corte limpio y bolsillos, la coreana ha dado una lección de estilo.

El accesorio: los crocs dorados de Questlove

  Los crocs de QuestloveChris Pizzello via AP

Después de un año en zapatillas de andar por casa, era difícil calzarse tacones o zapato cerrado. Es lo que ha debido pensar el músico Questlove, que se ha plantado en la alfombra roja con crocs dorados. El zapato, que ha pasado de odiado a amado durante el último año, se corona.