Portugal mira al apagón de España y sentencia: "Estamos mejor preparados"
Portugal ha realizado importantes inversiones en energías renovables, digitalización de la red y sistemas de respaldo que permiten una mayor capacidad de respuesta ante fallos inesperados.

El reciente apagón masivo en España ha encendido las alarmas en la Península Ibérica sobre la resiliencia de los sistemas eléctricos. Sin embargo, Portugal ha respondido con serenidad, asegurando que su infraestructura está preparada para enfrentar fenómenos de esta magnitud. Según declaraciones recogidas por el medio TSF, el país vecino afirmó con contundencia: "Estamos mejor preparados".
El comentario surge en un contexto de creciente preocupación por la estabilidad de las redes eléctricas europeas, especialmente en verano, cuando el consumo energético se dispara. Las autoridades lusas destacaron que Portugal ha realizado importantes inversiones en energías renovables, digitalización de la red y sistemas de respaldo que permiten una mayor capacidad de respuesta ante fallos inesperados.
"Portugal está mais bem preparado para fenómenos como o apagão", subraya el artículo de TSF, señalando que el país ha apostado por una estrategia diversificada y robusta en materia energética. Esta planificación, que incluye interconexiones internacionales y una creciente autonomía, ha sido clave para evitar crisis como la vivida recientemente en España. Puedes leer más sobre esta declaración en el artículo original de TSF: Portugal está mais bem preparado para fenómenos como o apagão.
Además, expertos lusos han apuntado que el sistema portugués cuenta con mecanismos de vigilancia en tiempo real y protocolos de emergencia bien definidos. Esto permite una detección temprana de anomalías y una actuación casi inmediata para evitar colapsos. Mientras tanto, en España se ha iniciado una revisión exhaustiva para entender las causas del apagón y prevenir futuros incidentes.
Aunque comparten muchas infraestructuras energéticas, la experiencia reciente ha servido para destacar las diferencias en la gestión entre ambos países. Portugal, con su enfoque preventivo y tecnológico, parece haber ganado un punto de confianza nacional. Ahora, la atención se centra en si otros países europeos seguirán su ejemplo y reforzarán sus sistemas frente a un futuro energético cada vez más exigente.