Rusia detiene a cuatro mujeres acusadas de colaborar con Kiev para atentar contra militares rusos
Las arrestadas residían en Crimea, península anexionada ilegalmente por la Federación, y también tenían en su diana instalaciones energéticas clave. Fueron entrenadas en el manejo de armas y minas, denuncia Moscú.

El Servicio Federal de Seguridad (FSB) de Rusia anunció este viernes la detención de cuatro mujeres, que fueron acusadas de colaborar con servicios secretos ucranianos para atentar contra altos cargos militares rusos.
Según la nota del FSB, citada por la agencia Interfax, las mujeres "reclutadas por la inteligencia ucraniana", fueron detenidas en Vorónezh, Rostov del Don y Sebastopol, en la anexionada península de Crimea.
Su objetivo, agrega la nota, era atentar contra oficiales de alto rango del Ministerio de Defensa de Rusia y cometer sabotajes en instalaciones energéticas rusas.
Según el FSB, las detenidas fueron entrenadas en el manejo de armas y minas en territorio ucraniano.
Durante los registros practicados en sus lugares de residencia, se incautó "una cantidad importante" de explosivos, así como otros equipos e instrucciones para fabricar bombas, agrega la nota.
Las autoridades rusas abrieron causas penales por terrorismo contra las detenidas, que pueden ser condenadas a hasta 30 años de cárcel.
En diciembre pasado un general ruso de alto rango fue asesinado por una bomba oculta en un patinete estacionado a la entrada en el edificio, donde residía el militar.
El pasado diciembre, el jefe de las tropas de Defensa Radiológica, Química y Biológica de las Fuerzas Armadas de Rusia, el teniente general Igor Kirilov, fue asesinado en Moscú junto a su ayudante, en un atentado con bomba que demostró que la inteligencia ucraniana funciona y es capar de tocar a la cúpula del Gobierno de Vladimir Putin.