Un avión militar en el que viajaba Margarita Robles sufre un intento de anular su GPS a su paso por Rusia
Se desconoce si el Kremlin ha tenido que ver o no, aunque se trata de un episodio similar al que viviera la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen a principios de mes.

La tensión entre Rusia y Occidente continúa desbordándose hasta límites pocas veces vistos en las últimas décadas. Durante la mañana de este miércoles -y sumándose a los episodios de invasiones del espacio aéreo de países cercanos- un avión A330, perteneciente al Ejército del Aire y el Espacio, en el que iba la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha sufrido un intento de perturbación a su GPS mientras pasaba por Kaliningrando.
Robles, que viaja en dirección a la base aérea de Siauliai, en Lituania, ha experimentado un episodio muy similar al que le ocurrió a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen el 1 de septiembre, que tuvo que aterrizar de emergencia. Pese a ello, el Kremlin negó la mayor, y desmintió que ellos tuvieran algo que ver.
La técnica usada por los saboteadores -de los que hay sospechas pero se desconocen datos concretos- consiste en inutilizar el GPS del avión militar. Sin embargo, en esta ocasión, esta técnica no ha obtenido frutos ya que este avión recibe las indicaciones desde un satélite militar.
Asimismo, tras conseguir llegar a tierra, uno de los comandantes a bordo ha restado importancia a lo sucedido y ha explicado que estas situaciones son habituales al sobrevolar Kaliningrado, ya sea en aviones civiles o militares.
Hay que señalar que, además de Margarita Robles, en el Airbus también viajaban familiares de los desplegados en el Destacamento VILKAS, así como periodistas que acompañaban a la ministra en su viaje hacia Lituania. En el país fronterizo con Bielorrusia se darán cita la titular de Defensa española con su homóloga lituana, en el marco de diseñar una estrategia para disuadir a Rusia.
