Un pueblo de Salamanca acaba con el agua no potable con carbón activo

En los últimos meses, varios pueblos de Salamanca han experimento numerosos problemas relacionados con la calidad del agua potable. Esto ha afectado directamente a la población, generando preocupación y quejas por la falta de acceso a agua segura para el consumo. Uno de los pueblos que más ha tenido que luchar contra esto es Ledesma, el cual el año pasado declaró oficialmente su agua como “no apta para el consumo humano”.

Como medida urgente, el ayuntamiento de este municipio ha aprobado la contratación de una obra que tratará de poner fin a estos problemas de contaminación del agua. Con ello se busca la mejora del sistema de filtración de la ETAP (Estación de Tratamiento de Agua Potable) mediante la instalación de un nuevo sistema de filtración que permita eliminar las plaguicidas y el metacloro que perturban el agua en la actualidad.

Este proyecto cuenta con un presupuesto máximo de 383.870,95 euros y se estima que el plazo de ejecución sea de seis meses. Para ello, la Junta de Castilla y León ha destinado una ayuda directa de 400.000 euros al ayuntamiento de Ledesma, la cual está destinada a cubrir los gastos de dicha iniciativa. Este nuevo método de purificación busca garantizar un suministro continuo y seguro para la población, tras meses y años de dificultades.

Carbón activo: la gran solución

Para mejorar la calidad del agua, el ayuntamiento ha propuesto llevar a cabo un tratamiento de afino, es decir, un proceso de filtración con filtros de carbón activo, los cuales se someterán a fases de lavado con agua filtrada. No obstante, no se descarta la posibilidad de posteriormente optimizar la dosificación de carbón activo en polvo, según se detalla en el propio proyecto. Algo que han afirmado que se decidirá con el paso del tiempo y dependiendo de la eficacia del nuevo sistema.

Este proyecto es una novedad, ya que durante los veranos de 2023 y 2024 Ledesma ha tenido que aprender a sobrevivir con estas complicaciones en el abastecimiento de este tan necesario recurso básico. Durante este tiempo se ha estado suministrando el agua potable mediante cisternas a depósitos ubicados en diversos puntos de la localidad, tanto para el consumo humano como para cocinar u otras actividades del día a día.

La introducción del nuevo sistema es una de las acciones más esperadas, ya que el carbón activo es conocido por su capacidad para filtrar impurezas y sustancias tóxicas. Esto lo convierte en la solución más eficaz para eliminar las plaguicidas y el metacloro y poder así volver a recuperar la normalidad en cuanto a calidad del agua se refiere, ofreciendo tranquilidad a los habitantes y un acceso seguro a este recurso básico.