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Soy técnica en nutrición y siempre tengo cuidado con estos mensajes que demonizan la fruta

Soy técnica en nutrición y siempre tengo cuidado con estos mensajes que demonizan la fruta

Esta experta recuerda que lo que realmente “boicotea” tu salud es el miedo a comer".

La fruta que da más energía que el café.Getty Images

Hay una serie de mensajes relacionados con la dieta que demonizan la fruta , con ello, boicotean tu dieta. Sobre ello advierte la técnica superior en Nutrición y Dietética Ana Luzón. 

"En plena temporada de frutas, resurgen titulares como 'Éstas son las peores frutas si estás intentando perder peso' o 'Evita estas frutas si quieres adelgazar' y como técnica en nutrición, quiero decirlo con claridad: estos mensajes no tienen nada que ver con salud, y sí mucho con la cultura de dieta", afirma esta experta.

"¿Desde cuándo la fruta es “el enemigo”?", se pregunta esta experta. "Frutas como el plátano, las uvas, el mango o la sandía suelen aparecer en esas listas negras por su contenido en azúcares naturales. Pero se olvida lo esencial: el contexto lo es todo. Una fruta entera aporta agua, fibra, micronutrientes esenciales y fitonutrientes con efectos protectores", responde.

Y añade que, en efecto, "tienen azúcares, pero dentro de una matriz natural que modula su absorción, no comparable al azúcar libre o añadido, por lo que culpar a la fruta del aumento de peso es una simplificación sin base científica sólida".

Estos mensajes que hay detrás de este discurso "no hablan de salud", afirma la nutricionista. "Hablan de control, de restricción, de pérdida de peso rápida y del viejo miedo a los carbohidratos. Son parte de la narrativa de la cultura de dieta, que reduce nuestro valor a una cifra en la báscula y clasifica alimentos como “buenos” o “malos” según su impacto en esa cifra".

Y lo peor, añade, es que generan culpa y confusión: "¿cómo algo que crece en la naturaleza, que es saciante y que forma parte de los patrones alimentarios más saludables del mundo, va a ser dañino?". Es más, agrega que "la ciencia asocia el consumo de frutas de forma consistente con un menor riesgo de enfermedades cardiovasculares, la reducción del riesgo de ciertos tipos de cáncer, el mejor control glucémico en personas con diabetes tipo 2, una mayor saciedad y mejor regulación del apetito, así como con una mejor calidad de la dieta global".

"En ningún estudio serio", asevera esta experta, "se ha demostrado que comer fruta entera de forma regular boicotee ningún proceso metabólico, más bien al contrario, suele acompañar a hábitos protectores y sostenibles a largo plazo".

Así que, Ana Luzón recuerda que "lo que realmente “boicotea” tu salud es el miedo a comer": "Es creer que para cuidarte debes vivir en alerta, evitar alimentos naturales y pensar que todo lo que comes tiene que estar validado por una app de calorías o por el último titular viral", afirma. "Así que la fruta no es tu enemiga. Lo es un modelo que te hace dudar de ella", añade.

Así que, en conclusión, Luzón te aconseja que "no dejes que titulares alarmistas te alejen de alimentos que tu cuerpo reconoce, agradece y disfruta". "Comer fruta no es un acto de sabotaje, es un acto de autocuidado, porque no se trata de comer perfecto, sino de comer con confianza, conexión y sentido común", recuerda.

MOSTRAR BIOGRAFíA

Soy redactora en HuffPost España, donde escribo de temas sociales y estilo de vida.

 

Sobre qué temas escribo

Hablo cada semana sobre varios temas en los que nos aporta una nutricionista sus consejos para llevar una vida saludable, sigo los temas de okupaciones en todo el mundo e intento reflejar cómo los problemas y las buenas noticias nos afectan ya de forma global con ejemplos de casos de particulares y poniendo el foco en especial en estudios científicos que demuestren todos los avances que estamos viviendo.

 

Mi trayectoria

Estudié Periodismo en la Universidad Complutense e hice el Máster de Periodismo de la UAM/ELPAÍS, así como el de desarrollo de directivos de PRISA y el IESE. He sido jefa de diversas secciones en EL PAÍS, después, directora de comunicación en diversos organismos, pero, sobre todo, lo que me gusta es escribir. Por eso estoy aquí, para contar historias y buscar temas exclusivos para los lectores. Antes de todo esto, mi especialidad fue durante años la educación. Soy madrileña, de padre catalán y abuelos vascos y de las dos castillas, por lo que me siento de toda España y no entiendo tanta confrontación. Y, sobre todo, me considero muy europea. He recibido el Premio de Periodismo de la Fundación Conocimiento y Desarrollo, así como el Premio de Periodismo Educativo Esteban Barcia. He escrito un par de libros sobre El papel de los padres en el éxito escolar de los hijos.

 


 

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