La ciudad de España donde para poner el Belén hay que realizar una expedición subacuática

En Navidad, los belenes se convierten en protagonistas de hogares, plazas e iglesias, reflejando de manera artística y simbólica el nacimiento de Jesús. Desde las clásicas representaciones hasta los más innovadores escenarios que desafían la creatividad, estos belenes adoptan múltiples formas: vivientes, minimalistas, gigantescos e incluso submarinos. Cada región hace de esta tradición algo único y personalizado.

En esta línea, hay una pequeña localidad de Castilla y León que cada año se convierte en el centro de atención de una de las tradiciones navideñas más singulares de España. En Covanera la colocación del belén no se realiza en la plaza ni en la iglesia, sino bajo las aguas de Pozo Azul, un manantial cristalino conocido por su profundidad y belleza. Este forma parte de la galería subacuática más larga a nivel nacional y una de las más importantes del mundo.

Desde hace dos décadas, los buceadores de la sociedad Delfín Club Burgos se sumergen en el pozo para instalar el belén dentro de una botella de buceo abierta. Esta curiosa representación del nacimiento de Jesús permanece bajo las aguas cristalinas durante todas las fiestas, para que todo el que desee pueda visitarlo. Equipados con trajes de neopreno y con el máximo respeto por el entorno natural, los buceadores convierten el Pozo Azul en un lugar mágico durante estas fechas.

Te dejará sin respiración

Este año ha sido la periodista burgalesa Rocío Martínez la persona elegida por el Delfín Club Burgos para bajar el tan esperado belén. Un acontecimiento que tuvo lugar el pasado domingo 15 de diciembre y que reunió a vecinos, curiosos y amantes del buceo en un ambiente festivo. “Cómo agradecer el honor de ser la elegida para bajar el Belén en un lugar mágico como el Pozo Azul de Covanera”, asegura la profesional en declaraciones recogidas por Diario de Burgos.

Toda una expedición subacuática que combina espíritu navideño con aventura y que con el tiempo se ha convertido en un atractivo turístico que atrae a visitantes de toda España e incluso del extranjero. Y no es para menos, ya que a cinco metros bajo la humedad turquesa permanecen ahora el niño Jesús, acompañado de la Virgen María y José, que aguantan bien la respiración como si de un concurso de apnea se tratase.

Pero Covanera es mucho más que su belén. Este pequeño pueblo de la provincia de Burgos es un rincón lleno de encanto natural y tradición. Rodeado de paisajes espectaculares y con una calidez propia de las comunidades rurales, esta localidad invita a descubrir su riqueza histórica, su gastronomía y la hospitalidad de sus pocos habitantes. En definitiva, se trata de un destino que, ya sea en Navidad o en cualquier época del año, deja una huella imborrable a quienes lo visitan.