La sombra de su participación en escándalos sexuales derivados de su relación con el pedófilo estadounidense Jeffrey Epstein sigue agrandándose sobre el hijo de Isabel II
Carlos III fue el primer monarca británico en realizar una visita de Estado a la Santa Sede, lo que marcó un acercamiento inédito entre la Iglesia Católica y la Anglicana.
La diferencia de criterios a la hora de actuar puede pasar factura a la relación entre padre e hijo, ya tensa por el acercamiento de Carlos III al príncipe Harry.
La anciana, que cumplió 116 años el pasado mes de agosto, sorprendió al monarca al recordarle que estuvo presente cuando la reina Isabel II lo investía como príncipe de Gales en 1969, cuando Carlos tenía 21 años.
Los príncipes de Gales acudieron al banquete de Estado con EEUU celebrado en el castillo de Windsor con los reyes Carlos III y Camila como anfitriones.
El duque de Sussex ha visitado Kiev con su Fundación Invictus, de la mano de la que ofrecerá nuevas medidas para los heridos, según informa en exclusiva 'The Guardian'.