Seis de cada diez usuarios de la sanidad privada prefieren ser atendidos en la pública ante un episodio grave y otros 9 titulares que deja el estudio del CIS
Un 37% cree que el problema de las listas de espera "ha empeorado" y un 52,9% acudió a un centro de urgencias al no poder ser atendido por el médico de cabecera.
La valoración de los españoles sobre el sistema sanitario público español vuelve a caer una vez más, aunque continúa siendo alta. El CIS ha compartido este miércoles un nuevo barómetro sanitario, realizado sobre los datos de julio de 2025, donde ha preguntado a los españoles sobre algunas cuestiones relativas al sistema sanitario español.
Entre ellas, cómo valora la sanidad pública, los tiempos de espera que han tenido que afrontar cuando han necesitado atención médica o cuál es su valoración con respecto a la inclusión de la Inteligencia Artificial (la cual ya adelantamos que no es muy alta).
La valoración media del sistema sanitario público español
La primera pregunta ha sido acerca de la opinión sobre el sistema sanitario del país, donde la mayoría de encuestados han respondido que creen que "funciona bien", aunque han señalado que "son necesarios algunos cambios". Respecto al grado de satisfacción con el funcionamiento del sistema sanitario público en España, la media ha sido buena, con un 6.
Otro de los datos que arroja el barómetro es el largo tiempo de espera que los encuestados señalan. Y es que, cuando se les ha preguntado a aquellos que no pudieron consultar un problema de salud con el médico de familia de la sanidad pública, la gran mayoría, un 42,4% respondieron que "le dieron cita para muchos días después y buscó otra solución", mientras que un 30,3% afirmó que "le dieron cita para muchos días después, pero ya no fue necesaria la visita o la consulta".
Un 24% tiene que esperar más de 11 días hasta que consiguen recibir atención sanitaria
Más de la mitad de aquellos que no pudieron consultar su problema de salud con el médico de familia de la sanidad pública porque no consiguieron contactar con el centro de salud, les dieron cita para muchos días después u otro motivo, afirmó que acudió a un centro de urgencias para que se lo resolviesen (un 52,9%).
Además, un 71,2% de los encuestados afirmó que desde que pidieron la cita para consulta, hasta que el médico de familia les pudo atender, pasó más de un día, ya que no había cita antes. De hecho, un 24% respondió que pasan al menos 11 días y más, hasta que consiguen recibir la atención sanitaria. De media, los españoles esperan una media de 8,85 días desde que piden la cita hasta que consiguen recibir atención sanitaria.
Un 21,9% tuvo que pasar de 2 a 4 horas en urgencias desde que llegó hasta que se fue o le ingresaron
De aquellos que tuvieron que acudir a un servicio de urgencias por alguna urgencia, la gran mayoría (un 21,9%) tuvieron que pasar al menos de 2 a 4 horas. De media, los españoles estuvieron en urgencias desde que llegaron hasta que le enviaron a casa o le ingresaron 207,03 minutos.
El tiempo de espera en los especialistas tampoco es alentador, pues tal y como respondieron los encuestados, de media, tuvieron que esperar hasta 115,65 días desde que tuvieron la consulta con el médico de atención primaria hasta que el especialista les atendió. De hecho, un 17,9% de los encuestados respondieron que pasaron más de seis meses hasta que por fin consiguieron hablar con el especialista.
A ese tiempo se le tiene que sumar el tiempo que pasa desde que se consigue hablar con el especialista por primera vez hasta que se consigue el diagnóstico y tratamiento para el problema, que de media son 51,25 días, pero que en algunos casos, un 5,6% pueden llegar a pasar otros seis meses.
Una media de 109,52 días de espera para ser atendidos por un profesional por un problema de salud mental o malestar psicológico
Es, posiblemente, uno de los ámbitos peor valorados. Y es que, aquellos que tuvieron la necesidad de consultar a un profesional sanitario de la pública por un problema de salud mental o malestar psicológico o emocional, y fueron atendidos por un psiquiatra, psicólogo, especialista u otro experto, tuvieron que esperar de media 109,52 días.
De hecho, cuando se les preguntó a los encuestados si los profesionales le dedicaron "suficiente tiempo", un 39,5% señaló que no. Respecto a la valoración de la atención, un 26,6% la consideró "muy buena", mientras que un 22,5% "regular" y un 14,2% "muy mala". Un dato curioso es que la gran mayoría de ellos, un 30,6% creen que no su problema no mejoró "nada" después de ir.
Un 37% cree que el problema de las listas de espera "ha empeorado"
Otra de las respuestas que más llama la atención es sobre los ingresos en los hospitales públicos, donde aunque un 66,9% respondió que pudo dar su opinión o participar en las decisiones sobre su problema de salud y su tratamiento, un 31,6% afirmó que no se le tuvo en cuenta como hubiese querido. Otro de los fallos que se detecta en esta cuestión es la baja nota (aunque aprobada) en comparación con el resto de valoraciones acerca del número de personas que comparten habitación, con una puntuación media de 6,71.
Las pruebas diagnósticas son otro punto a destacar, especialmente las colonoscopias, pues la gran mayoría de aquellos que se las tuvieron que realizar, un 18,3%, esperaron en este caso más de seis meses, con una media de 158, 56 días. Cuando se pregunta acerca del "problema de las listas de espera" y si se ha mejorado, empeorado o sigue igual, casi la mitad (un 46,1% de los encuestados) ha respondido que "sigue igual", mientras que un 37,0% cree que "ha empeorado".
Un 55,7% desconocía que se puede consultar los informes clínicos desde otra comunidad diferente a la suya cuando tengan que atenderlo
Otro punto a destacar es el desconocimiento. Y es que, cuando se pregunta sobre algunos servicios y mecanismos existentes, la gran mayoría de encuestados suele responder que desconocía de su existencia. Por ejemplo, cuando se cuestiona si conocían que los médicos de una comunidad autónoma "pueden consultar electrónicamente los informes clínicos que tenga un paciente en otra comunidad autónoma cuando tengan que atenderlo", más de la mitad, un 55,7% ha respondido que "no lo sabía".
Un 30% cree que en la privada le proporcionarían un mejor tratamiento en caso de tener un problema grave
Otra cuestión que se ha realizado a aquellos que cuentan con sanidad pública y sanidad privada es dónde cree que se le puede proporcionar un mejor tratamiento. Y aunque un 61,4% de las personas que cuentan con seguro privado cree que en la pública, un tercio de los encuestados afirmaron que piensan que se lo darían mejor en la privada. Tan solo un 2,9% opina que en ambas igual.
Un 27,1% cree que la asistencia sanitaria que recibe en su comunidad autónoma es peor con respecto al resto del Estado
Respecto a las diferencias entre la asistencia sanitaria por comunidades autónomas con respecto al resto del Estado, los encuestados creen que los servicios que ofrecen en su comunidad autónoma son iguales (39,8%) o mejores (un 22,1%) cree que son mejores, esta respuesta es similar en las preguntas sobre los medios técnicos que tienen las comunidades, así como con cómo está organizada. Sí que encuentran diferencias en la forma en que se encuentra financiada su comunidad autónoma con respecto al resto del Estado, considerándola "igual" (32,6%) o incluso "peor" (32,6%).
Suspenso en la valoración media de los robots o inteligencia artificial
Finalmente, el cuestionario también hace referencia a la valoración que los encuestados tienen sobre los robots e inteligencia artificial que sustituyen algunas acciones humanas, como hablar con una IA durante una consulta médica o someterse a una operación quirúrgica realizada mediante un robot, y en todas ellas suspenden de media.
Por ejemplo, cuando se les preguntó sobre cómo se sentiría personalmente sobre que siga la evolución de su enfermedad, un asistente virtual con IA cerca de la mitad de los encuestados respondieron que "totalmente incomodo", dejando una valoración media de un 3,56. También se mostraron reacios más de la mitad de los encuestados con respecto a hablar con una IA durante una consulta médica, afirmando en un 50,1% que se sentirían "totalmente incomodo/a" si eso ocurriese. En ninguna de las preguntas relativas a esta cuestión se obtuvo una media igual o superior al 5.
Sobre los límites legales de la inteligencia artificial en salud y servicios sanitarios, la gran mayoría se mostró "muy de acuerdo" o "de acuerdo" con que se debería legislar de forma específica en temas de salud, informar al paciente cuando los servicios sanitarios utilizan inteligencia artificial en su atención o dar la posibilidad al paciente de negarse a que se utilicen sus datos clínicos para desarrollar sistemas de inteligencia artificial.