Acude al dentista y resulta ser una carnicería: "Cuatro implantes arriba y ningún diente abajo"
Una denuncia colectiva busca reactivar una investigación que lleva 8 años paralizada
Un grupo de víctimas de los centros dentales low-cost Dentexia ha decidido dar un paso adelante y presentar una denuncia colectiva este domingo 2 de marzo ante el Ministerio de Justicia en Francia. La empresa, liquidada en 2016 tras apenas cuatro años de actividad, dejó a miles de pacientes con tratamientos a medio hacer y una larga lista de problemas de salud bucodental. La investigación judicial iniciada en su día sigue sin avances, y las víctimas buscan reactivarla.
Entre los 1.589 denunciantes se encuentra Christiane, una mujer de Lyon que en 2014 acudió a uno de los centros de Dentexia para tratar un problema de encías. Lo que debería haber sido una solución se convirtió en una pesadilla. "Me quedé dos años con cuatro implantes arriba y sin ningún diente abajo", contó a BFMTV. Durante ese tiempo intentó sin éxito contactar con el centro para completar el tratamiento, pero en 2016 Dentexia cesó su actividad y cerró sus clínicas.
El impacto en su vida fue devastador. "No salía de casa porque no quería que nadie me viera con esos trozos de metal colgando en la boca, no sabía qué hacer", relató. Además de los problemas de salud y autoestima, también tuvo pérdidas económicas considerables. Su presupuesto inicial era de 16.000 euros, pero calcula que perdió al menos 8.000.
Otra de las víctimas, un hombre residente en París, también vivió una situación similar. Su tratamiento se prolongó durante dos años para terminar con un solo implante en lugar de los dos previstos. "El especialista nunca estaba disponible y no tenía ninguna información clara sobre mi caso", lamentó. Además, denunció haber sido víctima de sobrecostes injustificados por procedimientos que nunca solicitó, como varios detartrajes.
El fundador del colectivo contra Dentexia, Abdel Aouacheria, subrayó la importancia de esta acción legal. "Si no hay un juicio contra Dentexia, no lo habrá para ningún caso similar en el sector dental. Necesitamos una jurisprudencia y tenemos que llegar hasta el final", afirmó. Según explicó, la situación no solo involucra negligencias y fraudes económicos, sino también "una red de sociedades comerciales opacas y la concesión de créditos bancarios abusivos".
Dentexia operaba bajo una estructura asociativa con varias clínicas en París, Lyon, Vaulx-en-Velin y Châlon-sur-Saône. Las quejas de los pacientes llevaron en 2016 a la apertura de una investigación judicial por presunta publicidad engañosa, ejercicio ilegal de la odontología, violencia con mutilaciones e invalidez permanente, estafa en grupo organizado y blanqueo de dinero.
Aouacheria destacó la dificultad de imputar responsabilidades directas a los dentistas, ya que muchos eran simples prestanombres, mientras que los que realizaban los procedimientos eran "profesionales recién titulados procedentes de Rumanía, Portugal y otros países".
Las víctimas temen que el caso quede en el olvido, pero no piensan rendirse. Para visibilizar su situación, un grupo de afectados llevará a cabo una acción simbólica: este domingo difundirán una composición sonora creada con los testimonios de una sesentena de damnificados. Con esta denuncia colectiva, esperan reactivar el proceso y "ayudar a la justicia" a organizar las querellas en distintas categorías.