Cuatro amigas alquilan un apartamento en Italia y quien les abre la puerta las hace huir: "Fueron maravillosas, pero no encajaban con nuestras vacaciones"
Todo cambió cuando encontraron a una mujer vestida con hábito y cruz alrededor del cuello.
Reservan un alojamiento con sorpresa incluida. Unas chicas australianas han compartido su última aventura en Italia en redes sociales, que se ha hecho rápidamente viral. Al reservar el alojamiento en ese país, nunca pensaron que lo habían hecho en una capilla dirigida por monjas.
Tal y como se muestra en el vídeo publicado en TikTok, que ha alcanzado 2,7 millones de visualizaciones, las cuatro amigas llaman a la puerta del supuesto alojamiento, y se encuentran a una mujer vestida con hábito y cruz alrededor del cuello. Fue en ese momento cuando cayeron en la cuenta de que habían reservado el alojamiento equivocado, pero aun así entraron a por las maletas.
No obstante, "lo que más les sorprendió", fue lo que encontraron al entrar en la habitación alquilada. Las chicas fueron colocadas en una estancia iluminada por luz azul neón, y había una estatua de tamaño natural sobre sus camas. "No pudieron ocultar lo sorprendidas que estaban". En un primer momento, intentaron comunicarse con una de las monjas con la ayuda de un intérprete, pero, finalmente, se rieron de la extraña situación.
Por todo ello, las jóvenes australianas decidieron abandonar el alojamiento. "Las monjas fueron maravillosas, pero no se adaptaba a nuestras vacaciones", escribieron en la descripción del video, consultado por el medio, y que ha sido visto 2,6 millones de veces. El video provocó una avalancha de reacciones contradictorias.
"Este es en realidad un lugar seguro para que las mujeres se queden y eviten que los delincuentes se dirijan a los turistas vulnerables. Me sentiría segura allí", asegura una internauta. "Deberíais de estar agradecidas de tener la oportunidad de alojarte en un lugar tan histórico", opinó otro. Asimismo, un usuario escribió que estuvo en el mismo lugar hace dos años y solo tenía palabras bonitas para el alojamiento. "Fue maravilloso, las monjas son muy amables y las vistas eran impresionantes", escribió.