Una máquina de hielo destruye una casa de un millón de euros y se inicia la batalla legal entre propietarios y vendedor
Alegan que no se les informó.
Lo que prometía ser un exclusivo refugio junto al mar acabó convirtiéndose en una pesadilla legal y doméstica. Una pareja que adquirió un apartamento de lujo en la costa de Helsinki por 2,35 millones de euros tuvo que abandonarlo apenas tres meses después de la compra, cuando una fuga en la máquina de hielo inundó la vivienda. La vivienda ya presentaba daños por humedad antes de la venta, pero esa información nunca llegó a los nuevos propietarios.
El piso, de 340 metros cuadrados y con apenas una década de antigüedad, fue vendido en la primavera de 2022 por 230.000 euros menos del precio inicial. El folleto de venta lo presentaba como un “hogar bañado por la luz” gracias a sus grandes ventanales. Pero poco después de instalarse, la pareja se encontró con otro tipo de "inundación": agua cayendo desde el techo inferior, procedente de una máquina de hielo defectuosa.
Las inspecciones revelaron una situación mucho más grave de lo esperado. Bajo los acabados, las estructuras estaban empapadas, oxidadas y contaminadas por moho. Las paredes mostraban deformaciones y el revestimiento del techo había comenzado a descolgarse. La pareja se vio obligada a desalojar la vivienda durante casi un año mientras se realizaban reparaciones.
Las investigaciones posteriores revelaron que los daños por agua no eran recientes. De hecho, ya habían sido detectados por un inquilino anterior en 2020, que alertó al propietario y abandonó el piso al no ver avances en las reparaciones. Se elaboraron informes técnicos y se inspeccionó la zona afectada, pero nada de esto fue informado a los compradores.
Antes de la venta, tanto el agente inmobiliario como el administrador de la comunidad aseguraron que no existían daños previos. El vendedor alegó que la máquina de hielo había estado apagada durante años por falta de uso, y más tarde sostuvo que los nuevos propietarios habían provocado una nueva fuga al encender el aparato sin revisar la instalación.
El caso terminó en los tribunales. El Tribunal de Distrito de Uusimaa (Finlandia) dictaminó que los compradores no fueron informados de los daños preexistentes y que las investigaciones anteriores fueron inadecuadas. Consideró probado que la filtración llevaba meses afectando al inmueble, incluso antes del cambio de propietario.
La sentencia obligó al vendedor a devolver 50.000 euros como descuento del precio de compraventa, más otros 7.000 euros por los daños causados a la cocina y los electrodomésticos, de diseño italiano. Además, deberá cubrir 42.000 euros en costas judiciales, lo que eleva el coste total del conflicto a cerca de 100.000 euros. El seguro de la inmobiliaria cubrió los daños estructurales.
El vendedor intentó apelar la decisión, alegando que el tribunal se había equivocado en su valoración, pero el Tribunal de Apelación de Helsinki denegó su solicitud. La sentencia del tribunal de distrito quedó en firme.