Gaspar Llamazares escucha el audio del presidente de la Sala del Supremo que condenó a García Ortiz y arrasa con la conclusión que saca
Sobre la "apariencia de neutralidad".

Gaspar Llamazares, concejal en el Ayuntamiento de Oviedo y exlíder de IU, ha sacado una conclusión que se está compartiendo cientos de veces tras escuchar un audio del magistrado Andrés Martínez Arrieta, quien estuvo en unas jornadas del Colegio de Abogados de Madrid con otros dos de los jueces que condenaron al fiscal general del Estado, Juan Ramón Berdugo y Antonio del Moral. El curso tuvo lugar en plena deliberación del fallo.
Según puede escucharse en un audio al que ha tenido acceso el programa La Hora de La 1, Martínez Arrieta espetó el pasado 18 de noviembre en plena deliberación de la condena a Álvaro García Ortiz, en un curso organizado por el Colegio de Abogados de Madrid: "Y con esto, señores, concluyo, que tengo que poner la sentencia al fiscal general".
"Ni siquiera una mínima apariencia de neutralidad", ha escrito Llamazares, que también ha reaccionado a un comunicado de la Asociación Judicial Francisco de Vitoria en el que expresaban su preocupación "por el descrédito" que "las críticas de responsables políticos a raíz de la condena al fiscal general del Estado" "suponen para el Poder Judicial y para quienes lo integran".
"Se desacreditan ellos solos"
"No hace falta poner adjetivos. Se desacreditan ellos solos, como nosotros los políticos", ha sentenciado Llamazares.
Mientras, el abogado y eurodiputado de los Comuns, Jaume Asens, ha presentado este jueves una querella criminal en el Tribunal Supremo contra el presidente de la Sala Penal, Andrés Martínez Arrieta, por un presunto delito de revelación de secretos previsto en el artículo 417 del Código Penal.
Según han argumentado desde el partido, la acción judicial se basa "en los hechos ocurridos el pasado 18 de noviembre, cuando el magistrado Martínez Arrieta, en pleno período de deliberaciones sobre la sentencia del fiscal general del Estado, intervino como ponente en un curso organizado por el Ilustre Colegio de Abogados de Madrid (ICAM)".
En el mismo curso, el magistrado declaró: "Acabo porque tengo que poner la sentencia del fiscal general del Estado", una afirmación pronunciada, inciden los comunes, "en tono jocoso y seguida de risas del público", que, según la querella, "constituye una revelación explícita de información reservada" sobre tres cuestiones: "El estado interno de las deliberaciones, el cambio de ponente respecto a la magistrada inicialmente designada, la existencia de una mayoría formada y la orientación del fallo".
