Greenpeace se cuelga en Industria contra el "impuesto al sol"
#NoAlImpuestoAlSol es una de las tendencias de Twitter de este jueves. Y lo es gracias a Greenpeace, que ha puesto su pelea en primera plana después de que, esta mañana, varios de sus activistas hayan intentado desplegar una pancarta de 19 por 12 metros cuadrados junto al Ministerio de Industria, con el mensaje “Impuesto al sol NO”.
Con su acción han tratado de mostrar su rechazo al proyecto de Real Decreto que regula el autoconsumo, y que puede ser aprobado en el próximo Consejo de Ministros de mañana viernes.
Un grupo de cuatro activistas han escalado hasta la parte más alta de la torre, ubicada junto al ministerio de Industria (perteneciente al Ministerio de Hacienda), mientras otros se quedaban en la fachada, de pie, con más pancartas.
Aunque en la imagen apenas se ve un letrero mediano, los preservacionistas portaban una pancarta mucho mayor, muy vertical, que se ha roto por el viento.
Cuando se han visto obligados a bajar, la Policía los ha identificado y los ha llevado a comisaría, junto a algunos de los activistas que los esperaban. En total, informa Greenpeace, ha habido cuatro arrestados.
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LA BATALLA
Greenpeace es sólo una de las decenas de organizaciones que han firmado un manifiesto para defender el autoconsumo energético. El documento ha sido firmado por una amplia representación de la sociedad civil: consumidores, sindicatos, asociaciones empresariales, ecologistas y movimientos sociales en defensa del derecho reconocido por la Comisión Europea como clave para la democratización de la energía.
Además, los 18 partidos políticos de la oposiciónen el Parlamento han firmado su compromiso con el desarrollo del autoconsumo sin barreras discriminatorias y se han comprometido a derogar, si fuera aprobado, el proyecto de Real Decreto de autoconsumo que actualmente se encuentra en tramitación.
Entre otras cosas, denuncian que la propuesta del Gobierno es parte de una "clara política de penalización de las energías renovables, el ahorro y la eficiencia energética", junto a muchas otras medidas disuasorias del un uso más eficiente de la energía, como el incremento abrupto del término fijo de la tarifa eléctrica.
A la movilización anterior se suma una campaña iniciada en Avaaz, en la que ya 193.000 personas han firmado para intentar evitar que se apruebe la nueva reglamentación. La propuesta de regulación del Gobierno ha recibido casi 40.000 alegaciones ciudadanas pidiendo su retirada, así como la oposición las principales asociaciones empresariales del sector, ecologistas, sociales, sindicales y de consumidores.
