Sintonía entre Trump y Putin, que acuerdan un alto el fuego en Siria y un canal bilateral para Ucrania

Sintonía entre Trump y Putin, que acuerdan un alto el fuego en Siria y un canal bilateral para Ucrania

Los dos líderes se han reunido en el marco del G20 y han hablado de la injerencia rusa en las elecciones: Rusia lo niega y EEUU mira hacia adelante.

Era, sin duda, la foto más esperada. El presidente de EEUU, Donald Trump, y su homólogo ruso, Vladimir Putin, juntos, dándose la mano, reuniéndose por primera vez después de ocho meses de la llegada del republicano a la Casa Blanca. "Trump se reúne con su creador", titulaba la edición estadounidense de El HuffPost: así se refería a este cara a cara entre el líder estadounidense y el que tantas veces le elogió en campaña, sin ocultar su favoritismo. Ambos han estado hablando, a puerta cerrada, durante dos horas y cuarto en los márgenes de la cumbre del G20, cuando estaba programado que el encuentro durara 35 minutos.

Ya lo decían ambos... "Tenemos muchas cosas que aclarar", anticiparon el jueves. Y tanto: si la campaña electoral había sido un camino de rosas, en los últimos meses la relación se había enfriado notablemente. Pero parece que la reunión les ha servido: según fuentes oficiales estadounidenses entre ambos ha habido "buena química".

Sobre la mesa han estado temas que les han distanciado, como Siria o Ucrania, otros como la lucha contra el terrorismo o los ciberataques y uno que les ha provocado un diálogo "muy enérgico". ¿Adivinan cuál? Sí, el que se refiere a la sombra que ha planeado sobre sus cabezas desde aquel 8 de noviembre en el que Trump se impuso a Hillary Clinton: la injerencia rusa en las elecciones estadounidenses.

Según el secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, que ha estado presente en el encuentro, Trump ha evocado la cuestión "más de una vez" y Putin ha negado estar implicado.

Tuve una conversación muy larga con el presidente de los Estados Unidos, hubo muchos temas como Ucrania, Siria, otros problemas, algunas cuestiones bilaterales, volvimos sobre las cuestiones de la lucha contra el terrorismo y la ciberseguridad

Vladimir Putin ha desmentido la injerencia y ha pedido "pruebas" a su homólogo estadounidense, según Tillerson, que ha dejado las futuras aclaraciones en manos de los servicios de Inteligencia. Según Lavrov, Trump "ha aceptado" el desmentido del mandatario ruso sobre uno de los temas que más ha lastrado el acercamiento entre Washington y Moscú.

El secretario de Estado de Estados Unidos ha abogado por mirar hacia el futuro y analizar posibles puntos de coincidencia. "Creo que es lo adecuado, en lugar de pasarnos mucho tiempo con un desencuentro que todo el mundo sabe que tenemos", ha argumentado en sus explicaciones, según medios norteamericanos.

Siria, ese país que les ha enfrentado —Rusia es un fiel aliado del régimen de Bashar Al Assad y Trump no ha dudado a la hora de bombardear el país— también ha dado pie a que se comprometan, junto a otros países, a un alto el fuego en el suroeste de Siria, una de las zonas de combates en estos seis años de guerra.

El ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, ha agreagado que los dos líderes se han comprometido además a asegurar que "todas las partes" implicadas en el conflicto respeten la tregua, que sucede a una larga serie de intentos fallidos de alto el fuego en esta guerra civil que desangra Siria desde 2011.

Las "zonas de distensión" cubren "Daraa, Al Quneitra y As-Suwayda", ha explicado Lavrov, que destacó que el acuerdo trata de respetar la "soberanía" de Siria y de hacer avanzar el proceso hacia un "acuerdo político".

Tillerson ha matizado a este respecto que la posición de Estados Unidos sigue siendo que el líder sirio, el presidente Bachar al Asad, no puede seguir en el poder si se quiere poner fin a la guerra civil y que no puede haber un papel para su familia en el gobierno a "largo plazo".

Además, ambos presidentes acordaron abrir un "canal bilateral" entre Washington y Moscú para abordar el conflicto en Ucrania y tratar de relanzar el proceso de paz iniciado con el Acuerdo de Minsk, porque "no está avanzando como querríamos", ha dicho Lavrov.

Antes de que se produjera el encuentro, el ambiente era de máxima cordialidad y esperanza, cosa bien diferente a lo que sucedió el jueves en Varsovia. La capital polaca fue escenario de las duras críticas hacia el país de Putin por parte de Trump, por ser "un agente desestabilizador" en Europa. Pero este viernes, al menos de cara a la galería, nada de tensiones. Poco después del inicio de la reunión ambos líderes se han mostrado satisfechos por este primer cara a cara y optimistas con respecto a sus potenciales resultados. De hecho, el magnate neoyorquino ha declarado que confía en que salgan "cosas muy buenas" para la relación bilateral a raíz de este cara a cara.

Putin y yo hemos discutido varias cosas y creo que ha ido muy bien

"Es un honor estar contigo", ha dicho Trump en la rueda de prensa conjunta. "Yo también estoy encantado de conocerte personalmente", porque, aunque hemos hablado por teléfono, nunca es lo mismo, ha contestado Putin.

"Putin y yo hemos discutido varias cosas y creo que ha ido muy bien", ha contado Trump. "Hemos tenido una muy buena conversación y obviamente vamos a seguir (hablando). Esperamos que haya cosas muy buenas para Rusia, Estados Unidos y todas las partes implicadas", ha añadido.

Ahora falta por ver qué consecuencias tiene el encuentro. No para la relación entre ambos países, sino para Trump, sobre quien están puestas todas las miradas en esta cumbre. Desde que llegó a la Casa Blanca el magnate ha prometido una "nueva era" con Rusia, pero las acusaciones de injerencia rusa en la campaña electoral de EEUU en 2016 y de la connivencia de miembros de la Administración con Moscú han hecho que esa buena relación no se vea con buenos ojos. De ahí que falte por ver qué piensan UE, clase política y opinión pública de EEUU de esa "buena química" entre ambos.

Serán ellos los que tengan la última palabra.