Al menos 21 muertos y 27 heridos en doble atentado suicida en Kabul
En el segundo atentado murió el fotógrafo Shah Marai, jefe del servicio fotográfico de la oficina AFP de Kabul.
Al menos 21 personas han muerto, entre ellas un fotógrafo de la AFP y otros tres reporteros, y 27 han resultado heridas en un doble atentado suicida perpetrado en la mañana del lunes en Kabul, según ha informado el ministerio afgano de Salud. El Estado Islámico ha reivindicado la autoría del atentado.
"El balance podría evolucionar", ha agregado el portavoz del ministerio Wahid Majroh, a la cadena de televisión Tolo News.
Poco antes, una periodista de la AFP, presente en la morgue del hospital Wazir Akbar Khan de Kabul, había dado cuenta de la muerte de 14 personas. Pero otras víctimas fueron trasladadas al hospital de la ONG italiana Emergency.
Cercano a la sede de los servicios de inteligencia afganos
El primer atentado tuvo lugar en un sector cercano a la sede de los servicios de inteligencia afganos (NDS) en Kabul.
En el segundo atentado, perpetrado 30 minutos después por un kamikaze que se encontraba en medio de un grupo de periodistas acudidos al lugar, murió el fotógrafo Shah Marai, jefe del servicio fotográfico de la oficina AFP de Kabul.
Shah Marai trabajaba desde 1996 para la AFP y había cubierto en particular la invasión estadounidense de Afganistán en 2001, consecutiva a los atentados de Al Qaeda en Nueva York y Washington. "El kamikaze se hizo estallar entre los periodistas y causó víctimas", ha dicho a la AFP el portavoz de la policía de Kabul, Hashmat Sanikzai.
Los otros tres periodistas muertos en la segunda explosión trabajaban para las televisiones afganas, uno de ellos para la cadena Tolo News.
El Estado Islámico reivindica el doble atentado
El grupo terrorista Estado Islámico (EI) ha reivindicado el doble atentado suicida. En un comunicado oficial del grupo yihadista difundido en canales de Telegram afines al EI, se identifica a los terroristas suicidas como Qaqaa al Kurdi y Jalil al Qurashi.
El primer terrorista, Al Kurdi, detonó su chaleco explosivo en el edificio de la Inteligencia afgana y, más tarde, su compañero hizo lo mismo en la calle para sorprender a las personas que habían huido del primer ataque y "hacerlos pedazos", según el grupo terrorista.
El EI ha afirmado que el ataque ha causado 110 víctimas, entre muertos y heridos, aunque el grupo suele exagerar las cifras referentes a sus atentados.
