Los alquileres a 100 euros en pleno centro de Madrid

Los alquileres a 100 euros en pleno centro de Madrid

Sí, existen a día hoy pese al gran incremento del precio del alquiler.

Un cartel de 'Se alquila' en una vivienda de Madrid, en una imagen de archivoEFE

Los alquileres de vivienda por 100 euros en pleno centro de Madrid existen, pero la mala noticia es que no son para todo el mundo. Más bien al contrario, casi nadie tiene unas condiciones tan ventajosas. Solo cuentan con ese privilegio quienes tienen firmado un contrato de renta antigua.

Tal y como recoge El Confidencial, se denomina renta antigua a los contratos anteriores al 9 de mayo de 1985 cuyo importe quedó congelado. Esta clase de contratos son heredados de unas leyes franquistas y permiten al inquilino pagar un alquiler muy reducido (entre 7 y 200 euros mensuales) por inmuebles que se encuentran en las zonas más valoradas de las ciudades más importantes de España.

Una de las personas beneficiadas en estos momentos por un contrato de renta antigua es Pascual Daureo, de 85 años, quien paga tan solo 130 euros al mes de alquiler (gastos incluidos) por un piso situado en el céntrico barrio madrileño de Lavapiés.

En declaraciones al mencionado medio de comunicación, Daureo asegura que “vivo en el mejor barrio del mundo. Disfruto mucho de la vida”. Una de las razones de esa alegría es que, en promedio, el hombre de 85 años paga en un año lo que el resto de sus vecinos de Lavapiés pagan en tan solo un mes.

El piso de Pascual Daureo tiene su historia. Inicialmente, el contrato de renta antigua pertenecía a los abuelos de su esposa y cuando ellos fallecieron el contrato pasó a estar a su nombre. “A nosotros no nos pueden echar, tenemos contratos que están blindados”, subraya Daureo en relación a que en su edificio hay otras cuatro personas que cuentan con uno de esos codiciados contratos de renta antigua.

No obstante, el contrato de renta antigua actual de Pascual Daureo ya no puede ser subrogado, por lo que el hombre de 85 años se está planteando adquirir la vivienda en propiedad y cedérsela a su hijos.