El jefe de los espías de Ucrania da un giro inesperado: nada de lo que sabemos de los soldados norcoreanos es cierto
Casi 8.000 soldados de Piongyang siguen combatiendo en la región rusa de Kursk, afirma Kirilo Budanov.

El jefe de la inteligencia militar ucraniana, Kirilo Budanov, acaba de aportar una información que viene a dar un giro a todo lo que se estaba publicando en los últimos días sobre la presencia de tropas de Corea del Norte en la región rusa de Kursk. ¿No se habían retirado de la línea del frente en suelo ruso? No, afirma. Aunque en menor número, siguen combatiendo, explica ahora en una entrevista.
El New York Times informó a finales de enero de que los soldados norcoreanos se habían retirado de las líneas del frente debido a las grandes pérdidas que estaban sufriendo. Un portavoz de las fuerzas especiales ucranianas confirmó ese dato, indicando que hacía semanas que no los veían en la zona que la propia Ucrania ocupa en la Federación desde agosto pasado. El martes, la inteligencia surcoreana también confirmó que militantes de la República Popular Democrática de Corea (RPDC) se habían replegado.
Sin embargo, Budanov niega ahora que los soldados norcoreanos hayan desaparecido, afinando que su número sólo ha disminuido y que actualmente estaban trabajando para averiguar por qué. Afirma que son unos 8.000 los soldados norcoreanos que siguen luchando contra Ucrania en Kursk, según ha dicho en una entrevista con la revista The War Zone publicada el 4 de febrero.
"Tenemos que esperar algún tiempo para ver si hay cambios reales o si se trata simplemente de una menor actividad durante un par de días", dijo Budanov.
El pasado otoño se desplegaron hasta 12.000 soldados norcoreanos en el óblast de Kursk para apoyar a las fuerzas rusas en la lucha contra una incursión ucraniana lanzada a principios de agosto de 2024. Al menos 300 soldados norcoreanos han muerto y otros 2.700 han resultado heridos en los combates, según afirmó el Servicio de Inteligencia Nacional de Corea del Sur el 13 de enero.
Según Budanov, las grandes pérdidas del ejército norcoreano pueden estar relacionadas con su falta de experiencia en combate y con la táctica de ataques en oleadas humanas con una cantidad limitada de equipamiento. Añade que los soldados norcoreanos atacan "prácticamente sin vehículos de combate".
Budanov también sugirió que el ejército norcoreano está tan dispuesto a avanzar a pie contra los drones y la artillería ucranianos debido a su lealtad al dictador norcoreano Kim Jong-un. Agregó que su desprecio por la seguridad personal hace que la defensa de Ucrania sea más difícil.