El juez Frank Caprio, famoso por su empatía en los tribunales, fallece a los 88 años: "Podemos impartir justicia sin ser opresivos"
El hombre, famoso en internet por su empatía a la hora de impartir justicia, llevaba años enfrentando un cáncer de páncreas.

El juez Frank Caprio, conocido en internet por su empatía y corazón al perdonar multas, así como por su forma de impartir justicia, ha fallecido este miércoles a los 88 años. Según ha podido informar su propia familia y sus cuentas oficiales en las redes sociales, el hombre "falleció en paz" después de "una larga y valiente batalla contra el cáncer de páncreas".
Caprio, quien trabajaba como jurista solidario y presentador del programa de televisión Caught in Providence, siempre afirmaba que su sala de audiencias era un lugar "donde las personas y los casos se atienden con amabilidad y compasión".
Uno de los momentos más virales del juez fue cuando desestimó un caso contra un hombre de 96 años que había sido acusado de exceder el límite de velocidad cuando llevaba a un hijo suyo con cáncer a hacerse un análisis de sangre.
Además, Caprio también será recordado por su lucha contra el acceso desigual al sistema judicial y las injusticias. "La frase 'Con libertad y justicia para todos' representa la idea de que la justicia debería ser accesible para todos. Sin embargo, no lo es", afirmaba el hombre en uno de sus videos.
"Casi el 90% de los estadounidenses de bajos ingresos se ven obligados a lidiar solos con problemas civiles como la atención médica, los desalojos injustos, las prestaciones para veteranos y, sí, incluso las infracciones de tránsito", agregaba.
"Espero que la gente comprenda que las instituciones gubernamentales pueden funcionar muy bien si se muestran bondadosas, justas y compasivas en sus deliberaciones. Vivimos en una sociedad muy conflictiva", señalaba en una de sus declaraciones en 2017. "Espero que la gente entienda que podemos impartir justicia sin ser opresivos", sentenciaba.
Políticos estatales, medios internacionales y sus familiares han lamentado su muerte y recordado algunas de las hazañas de su vida, que sin duda han dejado una huella imborrable y sentado un precedente sobre cómo, muchas veces, la empatía puede ser una de las mejores formas de hacer justicia.
