Imposible: María Corina Machado no estará en Oslo para recibir el Nobel de la Paz
La opositora venezolana había confirmado que llegaría para el evento, pero ya ayer anuló una rueda de prensa. La fiscalía chavista la consideraría "prófuga" si salía del país, pues la investiga por "actos de conspiración, instigación al odio y terrorismo".

Al final, ha sido imposible: la líder opositora venezolana, María Corina Machado, no estará hoy en Oslo (Noruega) para recoger el premio de la Paz de este año, según ha confirmado esta mañana a la televisión pública noruega NRK el director del Instituto Nobel, Kristian Berg Harpviken.
"Desgraciadamente todavía no está en Noruega y tampoco estará en el escenario del Ayuntamiento de Oslo a las 13.00 horas (misma hora en Madrid) hoy, cuando comience la ceremonia", declaró Harpviken, quien dijo que será la hija de Machado, Ana Corina Sosa, quien recoja el premio en su lugar y lea el discurso de aceptación del galardón.
Ya ayer, la cancelación de la rueda de prensa que tenía previsto dar en la misma ciudad, en vísperas de recibir el galardón, alimentó las especulaciones sobre si acudiría en persona a la ceremonia, cuando varios líderes latinoamericanos aguardaban ya su eventual llegada. Ahora ya no hay esperanza.
El fiscal general de Venezuela dijo ya el jueves que Machado sería considerada "prófuga" de la justicia si abandonaba el país. "Al estar fuera de Venezuela y tener numerosas investigaciones de carácter penal, se considera prófuga", afirmó a AFP Tarek William Saab, insistiendo en que para su oficina es alguien implicada en supuestos "actos de conspiración, instigación al odio, terrorismo".
Anulación y desánimo
El Instituto Nobel aplazó inicialmente la comparecencia, prevista para las 13.00 horas de ayer (misma hora en Madrid), y la canceló de forma definitiva varias horas después, apuntando como motivo a las dificultades a las que se enfrentaba Machado para salir de Venezuela, donde vive en paradero desconocido.
"La propia María Corina Machado ha declarado en entrevistas lo complicado que será el viaje a Oslo. Por lo tanto, en este momento no podemos proporcionar más información sobre cuándo y cómo llegará para la ceremonia del Premio Nobel de la Paz", informó la organización en un breve comunicado.
Machado había confirmado hace unos días al Instituto Nobel que viajaría a la capital noruega para recibir el premio, en la que sería su primera aparición pública desde enero pasado. Su familia, en horas más cercanas al momento, también se había mostrado optimista.
Su hermana, Clara Machado Parisca, dijo ayer, sin embargo, en una entrevista desde Oslo con la emisora colombiana Blu Radio que la intención de la premio Nobel es "estar aquí con nosotros", aunque aún estaban esperando "con fe de que va a llegar muy pronto". Ya no hay opción. En la capital noruega se encuentra también su madre, Corina Parisca, y su hija, Ana, además de dos hermanos.
No es la primera vez
No es, desde luego, la primera vez que un galardonado con el Nobel de la Paz no acude a recogerlo el día de la entrega, pues ya ha sucedido en media docena de ocasiones.
Cuando el chino Liu Xiaobo, entonces encarcelado, ganó el Nobel de la Paz en 2010, nadie acudió a recoger el premio: se colocó una foto suya en el sillón destinado a él, y la actriz noruega Liv Ullmann leyó el discurso de aceptación.
En 2022, el bielorruso Ales Bialiatski, uno de los tres galardonados con el Nobel de ese año y que permanecía en prisión, estuvo representado por su esposa, Natallia Pinchuk.
Aparte de los hijos de Machado, en Oslo se encuentran estos días varias figuras destacadas de la oposición venezolana, entre ellos Edmundo González Urrutia, candidato en las elecciones presidenciales del año pasado y exiliado en España desde septiembre de 2024, que viajó hoy a la capital noruega.
Cuatro presidentes latinoamericanos en Oslo
También se encuentran ya allí, invitados por la galardonada, el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, y el de Argentina, Javier Milei, y se espera la llegada del de Ecuador, Daniel Noboa, y mañana, la de su homólogo paraguayo, Santiago Peña.
Mulino dijo este martes desde Oslo que la entrega del Nobel a Machado es "un enorme simbolismo de que los astros se están alineando tras la libertad de Venezuela" a la vez que espera que "toda esta resonancia" logre repercutir "en lo interno" para que se comprenda que "hay una sola ruta y es la libertad" de ese país caribeño.
"Venezuela será un gran hito histórico de cómo un pueblo con resistencia, pero tenacidad y lucha, se libera de un dictador tirano (en referencia al presidente Nicolás Maduro)", señaló el mandatario panameño a la prensa desde la capital noruega.
Los cuatro presidentes serán recibidos mañana en audiencia por el rey Harald V tras la ceremonia de entrega, que comienza también a la una de la tarde, y luego se reunirán por separado con el primer ministro noruego, Jonas Gahr Støre.
Media docena de organizaciones noruegas convocaron, por su parte, este martes a una protesta delante de la sede del Instituto Nobel contra la elección de Machado, a la que acudieron unas 200 personas. "Machado no merece el Nobel de la Paz. El premio debería ir a alguien que esté a favor del dialogo pacífico y que una a la gente", dijo Kari Anne Næss, presidenta de la Asociación Noruega por la Paz, creada en 1885 y la organización de ese tipo más antigua de este país nórdico.
En la concentración participaron también dos representantes del Partido de Izquierda Socialista y de Rojo, cuarta y sexta fuerzas parlamentarias, respectivamente, y aliados del Ejecutivo laborista en minoría que gobierna Noruega. Ambos partidos se han mostrado en contra de la elección de Machado para el Nobel de este año.
