Carambola con aviones de combate rusos que, en principio, estarían destinados a las Fuerzas Aéreas de Egipto. Su destino final ha sufrido un desvío que pone en manos del mayor adversario de Marruecos uno de los Sukhoi Su-35 Flanker M. Argelia habría recibido al menos uno de estos cazas de cuarta generación, en la base aérea de Ain Beida/Oum el Bouaghi.

Así lo recogen múltiples blogs militares, aludiendo a una publicación recogida por el prestigioso Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS). Con todo, hay muchas dudas, puesto que la aparición del Su-35 en Argelia no descartaría a Irán como el comprador -y receptor final- ni quiere decir tampoco que el Su-57 -el modelo de avión que Argel había comprometido con Moscú- ya no esté destinado a la Fuerza Aérea de Argelia.

La clave pasa por las imágenes satelitales que han capturado al avión en cuestión, unas instantáneas que llevan la firma de la conocida empresa Maxar Technologies. Si bien hay informaciones que apuntan a una recepción en Irán del caza ruso, este extremo no ha podido ser verificado con imágenes con código abierto. 

Un pedido de 2018

Cabe recordar, según recoge la citada información, que Egipto suscribió un acuerdo de compra por el que se encargaron un total de 24 de estas aeronaves, en 2018. Todos los SU-35 se montan en la planta de producción Yuri Gagarin de Komsomolsk del Amur y han permanecido almacenados allí desde entonces.