La incursión ucraniana en Kursk comenzó con grandes expectativas, aunque con el trascurso del tiempo se fueron diluyendo, especialmente tras la retirada de gran parte del territorio de las tropas de Ucrania. Sin embargo, el país ha vuelto a regresar a Kursk, aunque esta vez con otro objetivo estratégico: destruir los puentes de la región. 

El ejército ucraniano está estudiando las posiciones rusas en torno a la aldea fronteriza de Tetkino, en el óblast e Kursk, al oeste de Rusia, y comenzando a destruir los puentes que conducen a la aldea. La intención no es otra que interrumpir la logística rusa y afectar el flujo de suministros a las tropas de Rusia que defienden Tyokino de las incursiones ucranianas para que la infantería luche en mejores condiciones. 

La táctica se puede observar en videos como el que comparte el usuario @wartranslated, donde se comprueba como un ataque aéreo acaba con un puente con tropas rusas que trataban de recuperar el equipo de vehículos inmovilizados parados en la zona. "¡Tomémoslo y larguémonos de aquí!", se escucha a uno de los rusos en la grabación, momentos antes de la explosión. 

Este tipo de técnicas no son nuevas, pues son las mismas que recibieron los ucranianos hace apenas dos meses a manos de Rubicon. "Rubicon emplea tácticas avanzadas de drones", ha explicado el analista independiente Andrew Perpetua. 

"A menudo atacan tramos cortos de carretera y los saturan con drones. Los ataques se llevan a cabo frecuentemente en grupo, a veces impactando la parte delantera, trasera y laterales de un vehículo casi simultáneamente", ha agregado. Cabe destacar que a pesar de las ofensivas ucranianas, los rusos no han tardado en reparar sus puentes para no interrumpir el suministro de recursos.