El Tribunal Supremo confirma la condena de 3 años y medio de cárcel, además de la sanción económica por apropiarse y usar 15 tarjetas que debería haber repartido.
También se ha perfilado una solución para el ingreso que estará disponible en "una segunda fase". Así funciona esta solución ideada ante la falta de sucursales en pueblos y zonas rurales.