Andoni Ortuzar hace una oferta de “entendimiento” y “pacto” con una condición: que muestren “un mínimo de respeto” y que “vengan a construir y no a destruir”.
El líder de Bildu, tras decir que "siente el sufrimiento" de las víctimas, trata de contentar a la rama más radical de los suyos, que tiene en los encarcelados su bandera.