Dudas en el PP después de que Feijoo haya ordenado endurecer su discurso migratorio: "Si imitamos a Vox, gana Vox"
El líder popular pidió este lunes en privado a sus barones y a la cúpula del partido "apretar" con el tema migratorio hasta prácticamente igualarlo al de Abascal.

Alberto Núñez Feijóo cree que la llave de su anhelado gobierno en solitario pasa por endurecer aún más el discurso migratorio del PP. Así se lo transmitió este lunes a los barones y a la cúpula de su partido durante la reunión del Comité Ejecutivo Nacional que tuvo lugar en la sede de la calle Génova. En dicho encuentro, el último del presente curso político, el presidente de los populares les pidió a todos ellos "apretar" con el tema migratorio hasta prácticamente igualarlo al de Vox.
En su particular análisis demoscópico, Feijóo considera que podría alcanzar la Moncloa sin necesidad de un gobierno de coalición con Abascal siempre que se quede cerca de los diez millones de votos (en las generales de 2023 obtuvo algo más de ocho). Y ese incremento de apoyo sólo pasa por pescar en el caladero de Vox, quien se ha visto beneficiado en estos últimos meses por su inflamado discurso antimigratorio.
En las últimas semanas, Feijóo ya ha dado buena cuenta de un giro brusco en sus mensajes relativos a la migración. En el Congreso Nacional del pasado 7 de julio, en el que revalidó su liderazgo interno, el líder popular se comprometió en sus primeros cien días de gobierno a "reducir la inmigración ilegal" en España. "Aquí no vale todo. El respeto es el mínimo exigible y la convivencia se trabaja con órdenes y control. A quien viene a trabajar y con reglas, bienvenido. A quien viene a otra cosa, aquí, no", dijo ante el aplauso efusivo de los afiliados del PP.
La semana pasada, Feijóo también planteó por primera vez la expulsión de inmigrantes con residencia legal en España en el caso de que delincan. “Debemos de replantearnos si determinados delitos que hoy no dan lugar a la expulsión deben de dar lugar en el futuro”, reflexionó en una entrevista en Cuatro.
Feijóo cree, sin embargo, que algunos territorios no comparten este mismo discurso o se muestran bastante laxos a la hora de abordar el tema de la migración. “Si imitamos a Vox, gana Vox”, es el comentario más repetido entre los recelosos. “No podemos el martes pedir que expulsen a los irregulares que delincan y el miércoles también a los regulares…”, añaden.
Los vaivenes de Feijóo en su estrategia sobre migración no dejan de descolocar a las autonomías. Todas menos Ceuta cumplieron su orden de plantar al Gobierno en la última reunión sobre el reparto de menores no acompañado. Algunos barones han ido a rebufo, pues en su día entendieron que había que pactar el asunto. “Estamos en la mitad, entre Vox y el PSOE, como quedó de manifiesto cuando ocurrieron los disturbios en Torre Pacheco”, dicen.
Pero con los sondeos en la mano, en Génova creen que el tema migratorio será el gran debate social de los próximos meses en España y que tanto el votante de centroderecha como muchos otros socialistas pedirán a los gobernantes más firmeza y contundencia contra la migración. En el CIS de junio, el último publicado hasta la fecha, ya era la segunda mayor preocupación de los ciudadanos (18,5%), sólo por detrás de la vivienda.
A Feijóo le preocupa que con un Vox fuerte sea más difícil negociar tras las generales para cumplir su compromiso de que no gobernará con Abascal. Cabe recordar que en el estudio del CIS antes mencionado, Vox alcanzaba su mejor resultado histórico con un 18,9% de estimación de voto, mientras el PP iba a la baja (26,5%) pese al desplome del PSOE por el estallido del 'caso Cerdán'.
Además, la dimisión obligada de Noelia Núñez ha roto su plan de arañar votos en las redes sociales, de donde se nutre electoralmente Vox. Núñez era junto a la recién nombrada portavoz del Congreso, Ester Muñoz, un perfil que gustaba especialmente a Feijóo porque, interpretaba, contrarrestaba el discurso de Abascal entre el votante más joven. Pese a todo, ha decidido no buscarle reemplazo y ha eliminado su cargo del organigrama.
Por el contrario, en un claro gesto a Isabel Díaz Ayuso, sí aprovechó la reunión de la Ejecutiva para situar al frente de la coordinación de Migración a uno de los mayores colaboradores de la presidenta madrileña: Rafael Núñez Huesca, actual portavoz adjunto del PP en la Asamblea de Madrid. Su secretaría dependerá, eso sí, de la vicesecretaria de Coordinación Sectorial, que dirige Alma Ezcurra.
