La valoración, el gran talón de aquiles de Feijóo en las encuestas

La valoración, el gran talón de aquiles de Feijóo en las encuestas

El líder del PP, a quien todas las encuestas sitúan en La Moncloa en 2024, no termina de despegar en su liderazgo de cara a la ciudadanía. 

Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, en el Senado.Europa Press via Getty Images

Salvo el Centro de Investigaciones Sociológicas, no hay encuesta que no dé al Partido Popular y a su presidente, Alberto Núñez Feijóo, la victoria en las próximas elecciones generales, que previsiblemente se celebrarán a finales de este año. 

A excepción del centro dirigido por José Félix Tezanos, que elabora el sondeo con mayor número de encuestados, la inmensa mayoría dan al PP ventajas superiores a los dos puntos. En algunas ocasiones, de hasta ocho puntos. 

El promedio de los últimos sondeos sitúan al partido de Feijóo en el 31% de los votos, mientras que los socialistas se quedan en el 24%. 

Las encuestas que proyectan escaños sitúan a los populares con entre 130 y 120 asientos en el Congreso. Siempre, en todo caso, necesitados de la ultraderecha para gobernar. 

Y, sin embargo, con estas cifras que llaman al optimismo para el PP, hay un dato en el que su líder, Feijóo, no termina de despuntar. Es más, flaquea con el paso del tiempo: su valoración entre la ciudadanía. 

En este sentido, se consulte el sondeo que se consulte, prácticamente no hay disenso. Desde su llegada al liderazgo del PP, el gallego ha ido perdiendo el aval de los ciudadanos ante un Sánchez que, sorprendentemente, pese a todas las polémicas y los líos en los que nada su Ejecutivo, se mantiene por delante del líder de la oposición. 

Los datos son contundentes. Si acudimos al CIS, Feijóo ha perdido en diez meses un punto de valoración. Así, en abril de 2022, cuando accedió a la presidencia del PP, obtenía una nota de 5,20. Según el último barómetro, el de enero de 2023, su nota es de 4,27. 

Y eso que en julio obtuvo la mejor nota de todos los líderes políticos, un 4,89, quizás en el punto más álgido de su liderazgo al frente del PP. 

Una estadística que quedaría como un dato más en la encuesta si no fuera porque otros parámetros relacionados con este también denotan el desgaste que está sufriendo el líder del PP desde que accedió a la octava planta de Génova 13. 

Por ejemplo, la confianza que genera entre los votantes. Cuando llegó a la presidencia del partido, Feijóo generaba entre mucha y bastante confianza a casi un 40% de los encuestados, concretamente a un 38,7%. Mientras que un 55,4% expresaba que el gallego le generaba entre poca y ninguna confianza. 

Diez meses después, ese porcentaje de ciudadanos a los que Feijóo no genera confianza ha crecido hasta el 71,2% y sólo un 26,4% afirma que el líder del PP le genera entre mucha y bastante confianza. 

Otra cuestión en la que Feijóo no termina de despuntar es en la preferencia entre los ciudadanos para ser presidente. A la cuestión de a quién prefiere como futuro jefe del Ejecutivo, el gallego sólo se ha acercado a Sánchez en julio de 2022, cuando el 20,8% apostó por él por un 22,1% que lo hizo por el actual inquilino de La Moncloa. 

Sin embargo, sus cifras a enero de 2023 son las mismas que con las que llegó a Génova 13. Entonces, en abril de 2022, el 16,4% le prefería a él por un 22% que apostaba por Sánchez. Por detrás, Yolanda Díaz, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, con un 9%. 

Hoy en día, Feijóo se apunta el mismo porcentaje y se queda, de hecho, a la misma distancia que cuando llegó al poder en el PP. 

Habrá quien piense que estos datos son cosa del 'CIS de Tezanos', pero la realidad es que otras encuestas apuntan a síntomas similares de falta de valoración entre la ciudadanía. 

Según Invymark, de abril a enero Feijóo ha pasado de tener una valoración de 4,20 a una de 3,8. Siempre por detrás de Sánchez. De acuerdo a Sociométrica, el líder del PP, que en septiembre era el más valorado con un 4,5, se ha dejado mucho estos últimos meses hasta quedarse en enero en el 3,7 y ser el tercero, por detrás de Yolanda Díaz e Íñigo Errejón, los más valorados. 

Sólo SigmaDos es más benévolo con el líder del PP. Su mejor nota fue en octubre, cuando superó al resto de líderes con un 4. Desde entonces, ha ido cayendo hasta el 3,6 en enero, pero ha conseguido repuntar al 3,9 en febrero volviendo a ser el que mejor puntuación obtiene por delante de Sánchez, que se queda en el 3,7. 

Sin embargo, en ese 'vis a vis' con el actual jefe del Ejecutivo llaman la atención los datos de las encuestas publicadas por El Español en los últimos meses. En ellas, se puede ver cómo en julio más del 50% de los encuestados prefería que Feijóo fuera presidente por delante de Sánchez. Pero eso ha ido menguando con el tiempo.

Ese porcentaje pasó en noviembre a ser del 42,6% para el gallego frente al 57,4% que prefería a Sánchez. En enero, pese a todas las crisis que ha vivido el Gobierno, la situación no ha mejorado sustancialmente. El 54,1% sigue prefiriendo al actual jefe del Ejecutivo frente al 45,9% que apuesta por Feijóo. 

La evolución negativa de la visión que la ciudadanía tiene de Feijóo se ve claramente en los datos que ha ido publicando el barómetro de 40dB para El País y la Cadena SER. 

En el mes de mayo, el líder del PP era el más valorado en las categorías de experiencia, preparación, buenas formas, inteligencia, conciliador, parecido a los españoles y gestionar tus ahorros. 

Apenas seis meses después, en noviembre, su mejor atributo, la experiencia, perdía claramente respecto a su rival más directo, Pedro Sánchez, pasando del 52,5% al 35,6%. Casi 17 puntos menos frente a un presidente del Gobierno que crecía en ese aspecto 14 puntos, saltando del 26,7% de mayo al 41,1%. 

  Sondeo de 40dB del mes de mayo de 2022.
  Sondeo de 40dB del mes de noviembre de 2022.

De hecho, Feijóo cae en prácticamente todos los aspectos analizados desde mayo hasta noviembre, destacando la preparación (-5,4 puntos), las buenas formas (-4,7 puntos), la inteligencia (-2,9 puntos) y el carisma (-2,7 puntos).

Las numerosas meteduras de pata en sus intervenciones públicas, sumadas a sus malos balances en los 'cara a cara' con Sánchez no le han ayudado a mejorar esa faceta de cara a la ciudadanía. 

Pero puede que, con todo y con eso, le sirva igualmente para su objetivo final: acceder a La Moncloa en 2024. 

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Jefe de Política de El HuffPost