La capital europea sin turismo de masas se convierte en un oasis de tranquilidad con restaurantes a 5 euros
Todo a precios de risa.

Si estás pensando en hace run viaje por algún sitio de Europa, poco común y ´sobre todo, barato, la solución está muy clara. Lejos de destinos lujosos, caros y masificados como pueden ser algunas ciudades europeas -o macrociudades- como pueden ser París, Londres o Berlín, existen alternativas mucho más asequibles, igualmente bonitas y con mucho por hacer.
En esta ocasión hablamos de una capital a la que seguramente, pocas veces se hayan planteado viajar. Se trata de Chisinau, en Moldavia. Actualmente es una ciudad en auge turístico y muy barata -no tanto como años atrás-. Entre los principales atractivos de la ciudad destaca su estampa verde, única y muy barata si se compara con el resto de capitales europeas, lo que hacen de Chisinau una joya aún por descubrir por millones de personas.
Otro de los aspectos que le otorgan una dosis de atractivo a esta ciudad es su ritmo pausado, y lugares como el Parque Central de San Esteban el Grande, conocido como el pulmón verde de la localidad, idílico para pasear y relajarse. Otros lugares icónicos de Chisinau es su Avenida Stefan cel Mare, además de museos y numerosos lugares históricos. Todo ello junto a restaurantes y cafeterías en los que se puede comer por apenas 5 euros por persona.
Según los últimos datos oficiales, Moldavia en su conjunto apenas recibe a unos 400.000 visitantes al año, lo que es sin duda, un gran atractivo, alejado de barullo, masificación y ruidos indeseados.