Alemania se resiste a enviar los tanques Leopard a Ucrania y no cede a las presiones

Alemania se resiste a enviar los tanques Leopard a Ucrania y no cede a las presiones

El Grupo de Contacto para Ucrania no ha logrado adoptar una decisión, aunque sí ha ratificado la determinación de los aliados occidentales a apoyar al país con sistemas de defensa antiaérea.

Dos tanques Leopard 2A6, de fabricación alemana, durante unas maniobras de la OTAN en Lituania.Sean Gallup/Getty Images

Ni con todos los focos apuntando hacia Ramstein, ciudad donde se celebra la reunión del Grupo de Contacto para Ucrania y en la que se decide el envío de armamento pesado, el Gobierno alemán se ha movido un milímetro de su postura ante el envío de tanques a Ucrania. El país germano, de momento, no ha cedido a las presiones de numerosos aliados para entregar a Kiev los codiciados tanques Leopard 2.

Al cierre de la reunión mantenida en la base norteamericana en Alemania, el secretario de Defensa de EEUU, Lloyd Austin, ha destacado que no ha habido acuerdo. "Han escuchado la declaración anterior del ministro de Defensa alemán: no, no ha habido una decisión para el envío de esos carros de combate", ha afirmado.

En este sentido, Lloys sí se ha hecho eco de las palabras que su colega alemán, Boris Pistorius, ha pronunciado este viernes, con las que aseguraba que Alemania ha ordenado "revisar" las existencias y disponibilidad de sus tanques Leopard y ha consideraba "en fase de discusión" que el país germano autorice el suministro a otros aliados.

"Lo prioritario es la defensa antiaérea de Ucrania y en eso nos concentramos"
Boris Pistorius, nuevo ministro de Defensa de Alemania

Eso en lo tocante a un eventual suministro de tanques por parte del Ejército germano, porque Alemania tampoco ha desbloqueado la posibilidad de que aquellos países que sí han acordado el envío de este tipo de armamento puedan hacerlo. Así, Berlín considera "en fase de discusión" autorizar su suministro a aquellos aliados que disponen de unidades -condición obligada al ser Alemania el fabricante y tratarse de material militar-. De ello dependen los paquetes anunciados por Polonia, Finlandia y Dinamarca.

"Lo prioritario es la defensa antiaérea de Ucrania y en eso nos concentramos", ha indicado  el nuevo ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, desde la base estadounidense de Ramstein. No se trata de una declaración a la ligera, puesto que buena parte de Occidente buscaba en sus declaraciones algún gesto que indicase que están más cerca de autorizar el envío de los Leopard. 

Estados Unidos tampoco desbloquea los Abrams M1

La postura que ha dejado entrever el ministro alemán de Defensa era ciertamente previsible, a tenor de la información desvelada por el medio estadounidense Politico, que aseguraba que entre los planes de Washington no estaba el envío de tanques Abrams M1 -considerados la élite de este tipo de armamento junto a sus homólogos rusos- y que de la reunión de este viernes lo que saldrá el anuncio de un paquete que contenga vehículo Stryker.

Este tipo de vehículos blindados cuentan con una gran utilidad sobre el terreno de combate, sobre todo para el transporte y despliegue de tropas empleando fuego de cobertura, pero están a años luz del poder de destrucción y blindaje de un Abrams M1 o un Leopard 2. 

Esta decisión, según ha dado a conocer The Wall Street Journal, sería la que está decantando la postura de Alemania. Si Estados Unidos da el paso enviando sus carros de combate, el Ejecutivo alemán se sumaría con los Leopard. 

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Sobre qué temas escribo

Aunque en el día a día acabe escribiendo de cualquier cosa que suceda en el mundo, “puede que me recuerdes” de algunas temáticas que suelen quitarme el sueño con especial frecuencia. Me gusta escribir de política internacional, sobre todo cuando esta es eufemismo de atroces injusticias contra los derechos humanos o el medio ambiente, así como para acercar causas sociales que pasarían inadvertidas (la siguiente podría ser la tuya, así que escríbeme). La morriña también me devuelve en ocasiones a Galicia, sobre todo para que sus historias no se pierdan en el camino a la meseta.

 

Mi trayectoria

Antes de llegar a El HuffPost en 2021, fui periodista en La Voz de Galicia durante cinco años. En aquella etapa también pasé por los micrófonos de ‘Radio Voz’, en distintos programas radiofónicos. Y, aunque parezca poco probable, bebía más café que en la actualidad.


Soy de Ribeira, una bella localidad coruñesa que probablemente recuerdes del marisco, las páginas de sucesos o de personalidades de las que solemos presumir (tenemos a la triplista olímpica Ana Peleteiro y a una de las Tanxugueiras).


Aunque bromeo con que soy doctorado en Periodismo Gonzo, en realidad solo soy licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid (UCM), pero, eso sí, tengo la orla de la misma tienda que la que se la hizo al rey Felipe VI. Aquellos años en Madrid me sirvieron para conocer la ciudad, pero también para entender que el mercado de la vivienda aún podía ir a peor. Ah, también tengo otra identidad secreta bajo la que hago rap o escribo poesía y que solo revelé en la redacción para que me dejasen entrevistar a artistas.

 


 

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