EEUU ataca una tercera nave con drogas en en el Caribe: ¿pero esto es legal o no lo es?
"Dejen de enviar (miembros del) Tren de Aragua a los Estados Unidos. Dejen de enviar drogas a los Estados Unidos", amenaza Trump.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo este martes que las fuerzas estadounidenses han atacado hasta ahora en el mar Caribe a tres embarcaciones de supuestos narcotraficantes provenientes de Venezuela y no dos, como hasta ahora había dicho. "Derribamos barcos. En realidad fueron tres barcos, no dos, pero ustedes vieron dos", dijo Trump a la prensa en la Casa Blanca antes de partir hacia el Reino Unido para una visita de Estado, que hoy comienza.
El mandatario fue preguntado por las declaraciones del líder venezolano, Nicolás Maduro, en las que acusó al estadounidense de querer invadir su país. "Dejen de enviar (miembros del) Tren de Aragua a los Estados Unidos. Dejen de enviar drogas a los Estados Unidos", respondió Trump.
El republicano se refirió a esta tercera embarcación un día después de informar que las fuerzas armadas estadounidenses habían atacado una lancha en la que, según dijo, murieron tres personas, que calificó de 'terroristas'. Poco después, en el Despacho Oval, afirmó que la lancha destruida transportaba cocaína y fentanilo.
El sábado pasado, Caracas denunció que un "destructor" de Estados Unidos abordó de manera "ilegal" y ocupó durante ocho horas una embarcación venezolana con "nueve pescadores" que estaban -subrayó- en aguas del país suramericano. Sin embargo, Estados Unidos no había reaccionado todavía.
Estos ataques se producen en medio de la escalada de tensiones entre Estados Unidos y Venezuela por el despliegue militar estadounidense en el mar Caribe con el argumento de combatir el narcotráfico.
La Administración de Trump acusa a Nicolás Maduro de liderar el denominado Cartel de los Soles, algo que niega el Gobierno de Venezuela, y ha ofrecido una recompensa de 50 millones de dólares por información que conduzca a la captura del mandatario venezolano. Maduro afirmó este lunes que las comunicaciones con Estados Unidos están "deshechas" ante lo que considera una "agresión" del país norteamericano, y agregó que Venezuela está ahora "más preparada" si tocara una "lucha armada".
Una legalidad cuestionable
Este caso ha provocado un importante debate sobre la legalidad de las acciones de EEUU, en aguas internacionales. Según expertos consultados por la cadena británica BBC, pueden haber violado el derecho internacional.
Entre otros, está el articulado de la Convención de la Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar. EEUU no es signatario pero "los asesores legales del Departamento de Defensa han dicho anteriormente que este debería actuar de manera coherente con sus disposiciones", indica el medio.
Bajo la convención, los países firmantes se comprometen a no interferir con los buques que operan en aguas internacionales. Existen excepciones a la regla, aunque limitadas. Por ejemplo, la detención e incautación está permitida cuando el barco en cuestión es perseguido desde las aguas de un país hacia alta mar.
Luke Moffett, profesor de la Queens University de Belfast, experto en reparaciones, derechos humanos y derecho internacional humanitario, dijo BBC Verify que "se puede utilizar la fuerza para detener una embarcación, pero generalmente deben emplearse medidas no letales". Cualquier movimiento de este tipo debe ser "razonable y justificado como necesario en defensa propia, cuando hay una amenaza inminente de lesiones graves o pérdida de vida", agregó el especialista, señalando que las acciones de EE.UU. probablemente eran "ilegales bajo el derecho del mar".
La profesora Mary Ellen O'Connell, de la Facultad de Derecho de la Universidad de Notre Dame, añade que el ataque "violó principios fundamentales del derecho internacional". "El asesinato intencional fuera de las hostilidades de un conflicto armado es ilegal a menos que sea para salvar una vida de inmediato", dijo.
También el artículo 2.4 de la Carta de las Naciones Unidas establece la prohibición del uso de la fuerza entre Estados, pero esta prohibición tiene excepciones, que incluyen la legítima defensa.
El Gobierno estadounidese puede alegar que la operación fue en defensa de la seguridad nacional al atacar una embarcación presuntamente operada por una organización que considera como terrorista, como es el caso del Tren de Aragua. "El hecho de que los funcionarios estadounidenses describan a los individuos que murieron en el ataque estadounidense como narcoterroristas no los transforma en objetivos militares legales", concluye también el profesor Michael Becker, del Trinity College de Dublín.
La Administración Trump argumenta que los barcos en cuestión transportaban narcóticos que "pueden matar" a su población. "El ataque ocurrió mientras estos narcoterroristas confirmados de Venezuela estaban en aguas internacionales transportando narcóticos ilegales (¡Un arma mortal que envenena a los estadounidenses!) con destino a EE.UU", escribió Trump en Truth Social.
