"Hemos estado esperando este día": Ucrania alcanza un submarino ruso con sus drones subacuáticos por vez primera
El ataque fue llevado a cabo con los llamados Sub Sea Baby, de producción nacional. "Como consecuencia de la explosión, el submarino sufrió graves daños y ha quedado fuera de servicio", se felicitan.
Drones navales ucranianos alcanzaron un submarino ruso valorado en 400 millones de dólares y capaz de lanzar misiles de crucero Kalibr mientras estaba estacionado en el puerto del mar Negro de Nororosíisk, según informó el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) en un comunicado.
Según la nota, el ataque fue llevado a cabo con drones llamados Sub Sea Baby de producción ucraniana. “Como consecuencia de la explosión, el submarino sufrió graves daños y ha quedado fuera de servicio”, se lee en el comunicado.
Alexander Kamyshin, asesor del presidente Volodimir Zelenski en asuntos estratégicos, publicó en X un vídeo sobre lo ocurrido, dejando clara su satisfacción: "Primera vez en la historia que un dron submarino derriba un submarino. Hemos estado esperando este día".
En el momento del ataque, el submarino en cuestión llevaba instaladas a bordo cuatro lanzaderas de misiles Kalibr, según la nota del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), que recuerda que Rusia se ha visto obligada a replegar a su flota del mar Negro al puerto de Novorosíisk debido a los repetidos ataques ucranianos con drones que sufrían sus barcos cuando estaban estacionados en la península de Crimea.
Por su parte, Rusia reconoció el ataque ucraniano, pero afirmó que había fracasado y que ningún barco ni submarino había resultado averiado. "El intento del enemigo de llevar a cabo un sabotaje utilizando un vehículo submarino no tripulado no logró sus objetivos", según declaraciones de Alexei Rulev, jefe del servicio de prensa de la Flota del mar Negro, recogidas por los medios de comunicación estatales.
Por qué es importante
Según ha indicado el organismo de seguridad de Ucrania, la construcción de un submarino de este tipo podría costarle a Rusia hasta 500 millones de dólares (más de 425 millones de euros) en la actualidad, debido a las sanciones occidentales impuestas a Moscú, que no ha confirmado el ataque.
El submarino de la clase-Kilo se utiliza para lanzar misiles de crucero Kalibr, disparando hasta cuatro a la vez, según la declaración de la SBU. Rusia ha utilizado los misiles durante toda la guerra para atacar Ucrania. La agencia añadió que el submarino es conocido como Black Hole debido a la capacidad del casco para absorber el sonido y permanecer indetectable por el sonar.
El SBU aseguró que el buque se había visto obligado a permanecer en el puerto de Novorosíisk debido al éxito de las operaciones con drones marinos ejecutadas por Ucrania, que obligaron a Moscú a trasladar muchos de sus barcos y submarinos desde la bahía de Sebastopol, en la península ocupada de Crimea, que Rusia se anexionó de forma unilateral ya en 2014.