La Flotilla ya va camino de Túnez pese a las amenazas de Israel y la baja de cinco pequeñas embarcaciones por seguridad
Cinco de los veinte barcos que han salido de Barcelona se han visto obligados a regresar por las "condiciones climáticas extremas".

La práctica totalidad de la veintena de barcos de la Global Sumud Flotilla que salió este lunes desde el puerto de Barcelona se encuentra ya camino de Túnez, donde se unirán a otros tantos buques que buscarán romper el bloqueo israelí de Gaza. Cinco de las embarcaciones más pequeñas, no obstante, se han visto obligadas a regresar anoche "debido a las condiciones climáticas extremas". Según ha informado la organización en un comunicado, si volvieron fue por la "seguridad" de toda su tripulación.
Este tipo de desafíos, tal y como han señalado fuentes de la Flotilla, "son comunes cuando pequeñas embarcaciones civiles deben realizar la labor que los Gobiernos no han hecho, navegar para romper el asedio y poner fin al genocidio". "Si tan solo uno de los Gobiernos cómnplices enviara sus barcos, mucho más capaces, a Gaza, estos obstáculos no recaerían sobre la gente común", han denunciado para confirmar que, sin embargo, el resto de buques navega ya con el "compromiso" de unirse a los barcos que saldrán de Túnez, Grecia e Italia y, desde allí, "llegar a Gaza" cargados con ayuda humanitaria.
La Flotilla ha mantenido viva su responsabilidad no solo frente al mal tiempo, sino también a pesar de las amenazas del Gobierno de Israel. Este lunes se supo que el ministro de Seguridad israelí, Itamar Ben-Gvir, presentó el domingo al primer ministro, Benjamin Netanyahu, un plan para la detención del mayor intento por romper el bloqueo de Gaza que considera como "terroristas" a todos los activistas embarcados.
La propuesta de Ben-Gvir da por hecho la interceptación de todos los barcos y el envío de su tripulación a las cárceles de Ketziot y Damon, prisiones de máxima seguridad. A diferencia de en casos anteriores, como ocurrió con las flotillas del Handala o el Madleen, Israel no piensa deportar a los miembros de la Flotilla, sino que su intención es mantenerlos en "detención prolongada".
Para los organizadores de la Global Sumud Flotilla, las advertencias de Israel no suponen ninguna sorpresa. Hace unos días, uno de los coordinadores, el activista hispanopalestino Saif Abukeshek, comentó a El HuffPost que la reacción de Israel "dependerá de la presión que se haga a nivel internacional". "La manera en la que Israel actúa responde siempre a la complicidad de los Gobiernos y Estados. Ahora irá en la misma línea. Dependerá de la presión política, de si los Gobiernos hacen su trabajo. Nosotros haremos el nuestro, y si lo hacemos es porque los Gobiernos han fracasado en su principal responsabilidad, proteger a las personas", declaró.
