Un país de la OTAN desata el enfrentamiento entre los Eurofighter y los cazas del futuro de EEUU: "Impacto devastador"

La Defensa de Reino Unido acaba de reiterar su compromiso con el avión de combate F-35, con el que se ha implicado hasta al menos 2069, en un momento en que se expanden las dudas sobre las adquisiciones previstas del avión de combate de quinta generación. De esta forma, su implicación va a más e incide directamente en el futuro del programa Eurofighter. 

Según ha informado el medio especializado infodefensa.com, las autoridades de adquisiciones militares del país se están planteando adquirir también cazas F-35A, la versión de despegue y aterrizaje del modelo, del que hasta ahora Londres solo había encargado F-35B, la variantes preparada para despegues cortos y aterrizajes en vertical.

El plan incluye la posibilidad de realizar un pedido de cien aeronaves, con los que se sustituirán además las decenas de Eurofighter Typhoon de la versión más antigua, que van a ser retirados, según recoge el periódico The Times. Reino Unido apunta así hacia un mayor concierto con el F-35 de la estadounidense Lockheed Martin, del que es el único socio de primer nivel. 

Esto, sin embargo, irá en detrimento de su implicación en el Eurofighter, del que es socio junto a Alemania, Italia y España. Estos tres países ya han encargado nuevas unidades de las versiones más avanzadas de este aparato, que fue introducido en 2003, y se ha estado esperando que Londres aacabase realizando a su vez un nuevo pedido. 

Ahora esta posibilidad se aleja, lo que ha causado inquietud entre los empleados británicos, en riesgo por la preferencia del caza estadounidense frente al de fabricación europea. El sindicato británico Unite ha advertido de que si se opta por los F-35A, en detrimento de los Eurofighter, se producirá un "impacto devastador". 

La secertaria general del sindicato, Sharon Graham, ha afirmado que, si elige el avión estadounidense, "el Gobierno estaría abandonando la soberanía, socavando, descalabrando nuestra industria de defensa, poniendo en peligro miles de puestos de trabajo en el Reino Unido y tirando por la nroda los beneficios económicos a largo plazo".