Arabia Saudí planea una ciudad solo para mujeres

Arabia Saudí planea una ciudad solo para mujeres

Getty File

Las mujeres trabajadoras de Arabia Saudí contarán con una ciudad industrial solo para ellas. Se construirá en Hofuf, en el este del reino, y será un lugar donde la población femenina podrá trabajar sin contravenir las estrictas leyes islámicas que rigen el país, informan el diario británico The Guardian y el árabe Arab News.

La ciudad será la primera de hasta cuatro que las autoridades sauditas pretenden edificar, y estará lista el próximo año. El objetivo es ayudar a que las mujeres tengan un papel más importante en el país y a que consigan independencia económica, pero respetando la segregación de sexos obligatoria en los espacios públicos.

La medida ha creado polémica, ya que no deja de fomentar la segregación entre hombres y mujeres. Pese a que la idea partió de un grupo de mujeres de negocios saudíes, que consideran que en esta ciudad las sauditas podrán formarse de forma adecuada para lograr su incorporación al mundo laboral, ya se han oído voces en contra. Homa Khaleeli, periodista de The Guardian especializada en asuntos islámicos, considera que esta decisión no contribuirá a aumentar la independencia femenina. "En un país donde el 60% de los graduados son mujeres y, sin embargo, el 78% de ellas está en paro, ¿Cómo va a ayudar la separación por sexos a eliminar la discriminación?", se pregunta en su blog.

Arabia Saudí se rige por la sharia, un código de leyes ultra conservador que contempla duras restricciones para sus mujeres: no pueden conducir y no pueden trabajar sin permiso de un varón -padre o esposo, habitualmente-. Sin embargo, las saudíes representan el 15% de los trabajadores de fábricas. Su presencia destaca sobre todo en la industria textil, farmacéutica y alimentaria, y en los últimos años se han incrementado las empresas con personal mixto, aunque aún son una minoría.

CIEN MILLONES DE EUROS Y 5.000 PUESTOS DE TRABAJO

El proyecto de Hufuf ha sido aprobado por el ministro de asuntos municipales y rurales del país, el príncipe Mansour bin Miteb bin Abdulaziz y contará con una inversión superior a los 100 millones de euros. El objetivo de las autoridades saudíes es aglutinar la industria liderada por mujeres en esta futura ciudad y crear más oportunidades de empleo para ellas y también para ir sustituyendo gradualmente la mano de obra extranjera por féminas sauditas. En total, calculan que se crearán unos 5.000 puestos de trabajo.

"Estoy seguro de que las mujeres pueden demostrar su eficacia en muchos sectores de la industria y encontrar el que más se ajuste a sus intereses y sus habilidades", ha señalado el subdirector de la Autoridad Saudí de Suelos Industriales (Modon), Saleh Al-Rasheed. La ubicación ha sido elegida por su cercanía a una zona residencial "con fácil desplazamiento para ellas", ha declarado.

RÉCORD EN DISCRIMINACIÓN

Arabia Saudí es el segundo exportador de petróleo por detrás de Rusia y es también uno de los países del mundo donde existe una mayor desigualdad entre las condiciones de vida de hombres y mujeres. Suele ser blanco de las campañas de denuncia de organizaciones de derechos humanos por su constante discriminación hacia el sexo femenino: En septiembre de 2011, una mujer fue condenada a diez latigazos por conducir un coche por las calles de la ciudad de Jeddah, aunque posteriormente el castigo fue revocado.

Dos días antes, el rey Abdullah bin Abdelaziz había anunciado que permitirá la inclusión de mujeres en el Consejo de Shura, de índole consultiva, y también anunció que podrán participar como candidatas y como votantes en elecciones locales de 2015.

Este año, las mujeres saudíes han podido participar por primera vez en unos Juegos Olímpicos, aunque con una condición: que vistieran un uniforme de acuerdo con las normas religiosas del país. Así, la atleta Sarah Attar y la judoca Woodjan Ali Seraj compitieron en Londres 2012, pero con la cabeza convenientemente cubierta por un pañuelo.