Mati, chef en Austria, ganando más de 2.000 euros al mes: "Al momento de negociar el dinero la experiencia cuenta mucho"
Con el tiempo y la práctica las condiciones mejoran.

En los últimos años ha crecido el número de jóvenes que se marchan al extranjero en busca de mejores oportunidades laborales, salarios más competitivos y experiencias que combinan trabajo con aventura. Las estaciones de esquí europeas y la hostelería se han convertido en destinos especialmente atractivos para quienes buscan un cambio de vida. Este es el caso de Mati, un cocinero argentino que ha encontrado en los Alpes un camino profesional.
El joven, natural de Buenos Aires, lleva cinco años abriéndose camino en el mundo de la gastronomía y actualmente trabaja en un pequeño pueblo de los Alpes austriacos. En un vídeo publicado en TikTok por el usuario @laurigonzalez00, el chef relata cómo es su día a día: jornadas intensas de 48 horas semanales con un día de descanso, y tiempo libre que suele dedicar a esquiar o practicar snowboard en las montañas cercanas.
El cocinero asegura percibir 2.250 euros netos al mes, una cifra que, según explica, depende mucho del nivel de experiencia del trabajador. “Mi primer trabajo lo hice como ayudante de cocina, entonces al momento de negociar el dinero obviamente la experiencia cuenta mucho”, dice Mati en el vídeo, quien añade que con el tiempo y la práctica las condiciones mejoran y es más fácil acceder a puestos mejor remunerados dentro de la cocina.
Un balance positivo
Una de las grandes ventajas que destaca Mati es el paquete que ofrecen muchos empleos en estaciones de esquí: alojamiento y comida están incluidos en la mayor parte de los casos, por lo que el salario neto puede transformarse casi en ahorro puro. Ese tipo de condiciones son habituales en empleos de temporada en resorts de montaña, que además a menudo incorporan otros beneficios como forfaits o equipos de esquí gratis.
Sobre la carga laboral, Mati también señala el lado menos amable del oficio. “Lo peor es la cantidad de horas que tienes que trabajar, el estrés que puede conllevar… Pero en rasgos generales es positivo”, resume el cocinero. En Austria la legislación establece límites sobre la jornada: la media no debe superar las 48 horas semanales en períodos fijados por la ley, aunque en la práctica existen excepciones.
Para Mati, el balance es positivo: la vida en un pueblito en medio de la nieve, la comunidad internacional y la posibilidad de practicar deportes de montaña compensan las largas jornadas y el estrés de la cocina. Por ello, anima a todo aquel que esté pensando en trabajar en el extranjero a que no tenga miedo y se aventure en un nuevo camino profesional, ya que las ganas de recorrer y conocer son las que mueven el mundo.
