Pedro Castillo anuncia la formación de un nuevo gabinete en Perú tras la renuncia de la primera ministra

Pedro Castillo anuncia la formación de un nuevo gabinete en Perú tras la renuncia de la primera ministra

El mandatario ha aceptado también la renuncia del ministro del Interior y ha destituido al jefe de la Policía Nacional, quienes protagonizaron un enfrentamiento.

El presidente de Perú, Pedro Castillo.Marcos Reategui via Getty Images

El presidente de Perú, Pedro Castillo, ha anunciado este lunes que conformará un nuevo gabinete de ministros para renovar al que lideró la primera ministra Mirtha Vásquez, quien ha informado que renunció “ante la imposibilidad de lograr consensos en beneficio del país”.

“Como siempre he anunciado en mis intervenciones, el gabinete está en constante evaluación. Por tal motivo, he decidido renovarlo y conformar un nuevo equipo”, ha señalado Castillo en Twitter.

Sin embargo, poco después de lo anunciado por el mandatario, Vásquez ha publicado un mensaje en Twitter en el que ha afirmado que, en realidad, había dimitido y que su decisión ya había sido aceptada por el gobernante.

En su mensaje, Castillo solo ha agradecido “el apoyo” de Vásquez y de los ministros del gabinete que conformó en octubre del año pasado, tras lo cual ha añadido que su gobierno seguirá “por el camino del desarrollo por el bien del país”.

La renuncia del ministro del Interior

El mandatario ha anunciado los cambios en el gabinete horas después de aceptar la renuncia del ministro del Interior, Avelino Guillén, y también destituir al jefe de la Policía Nacional, Javier Gallardo, quienes protagonizaron un enfrentamiento durante las últimas semanas.

Guillén renunció el viernes al no sentirse respaldado por Castillo en su recomendación de destituir a Gallardo, con quien mantenía grandes desavenencias en su criterio sobre los relevos y ascensos dentro de esta fuerza de seguridad.

Además, mantuvieron discrepancias por nombramientos en direcciones clave de la Policía y denuncias de corrupción al interior de la PNP, que incluso afirmaron que en el proceso de ascensos se pagó sobornos hasta por 25.000 dólares. En una entrevista publicada este domingo en el diario La República, Guillén afirmó que “esperaba que el presidente de la República respaldara a su ministro, pero prefirió guardar silencio y ponerse de perfil”.

“Ese es un silencio estruendoso, porque dice mucho, ha expresado una posición de respaldo claro y directo al señor comandante general de la Policía. Me siento en calma porque, a pesar de todas las limitaciones y enormes retos, alcanzamos los objetivos que inicialmente nos habíamos propuesto”, sostuvo. Tras la renuncia de Guillén, medios locales anticiparon que podría presentarse una crisis en el gabinete porque el ministro contaba con el apoyo de la primera ministra.

En ese sentido, Vásquez ha publicado este lunes en Twitter su carta de renuncia, en la que afirmó que el gobierno ha llegado “a un momento crítico” con la crisis generada en el Ministerio del Interior, que consideró parte de “un problema estructural de corrupción en diversas instancias del Estado”.

Tras reafirmar su “preocupación” por la necesidad de hacer reformas profundas en el Estado, ha enfatizado que si estos cambios “no se suceden, menos aún en los propios entornos del Ejecutivo, no será posible avanzar”. “En este momento es inadmisible dudas o indecisiones”, ha remarcado.

La primera ministra ha lamentado que al interior del Ejecutivo no se hayan dado consensos “sobre el liderazgo de un sector tan importante como el Interior”, por lo que puso “en duda entonces la posibilidad de avanzar en otros cambios imprescindibles en otros ámbitos”.

Por ese motivo, ha considerado que su rol “se ha agotado” y es necesaria “una recomposición del gabinete”, por lo que ha presentado su “renuncia irrevocable” al cargo, tras agradecer a Castillo por “la oportunidad brindada” y reafirmar sus deseos “de la continuidad y mejora” de su gobierno.

Vásquez, una abogada ambientalista y defensora de los derechos humanos muy reconocida en Perú, asumió como primera ministra en reemplazo del parlamentario Guido Bellido, quien generó gran polémica en su país durante los primeros meses del gobierno de Castillo por sus posturas de izquierda radical.